Con la temporada de verano cada vez más cerca, el municipio de Villa Carlos Paz puso en marcha una serie de operativos destinados a controlar la venta ambulante y las ocupaciones irregulares del espacio público.
El secretario General y de Vinculación Institucional, Juan Lucero, explicó que la medida busca ordenar la actividad comercial y preservar la imagen turística de la ciudad.
“En Carlos Paz, la venta ambulante está prohibida en toda su extensión, salvo algunas excepciones tradicionales en la costanera, como los vendedores de pastelitos o churros. Sin embargo, en los últimos días la situación se agravó, no solo por la presencia de vendedores ambulantes, sino también por empleados de locales comerciales que se comportan de forma indebida en la vía pública”, señaló el funcionario.
Lucero advirtió que estos llamados “promotores” o “llamadores” que operan frente a bares y restaurantes están infringiendo tanto normas municipales como contravenciones provinciales. “No es lo que queremos para nuestra ciudad. Villa Carlos Paz es uno de los destinos turísticos más importantes del país, y su centro debe mantenerse ordenado y prolijo”, sostuvo.
Clausura de un local gastronómico
Cabe recordar que, el martes pasado, el municipio dispuso la clausura de un local gastronómico del centro tras acumular más de veinte actas por infracciones reiteradas por contratar a personas en forma irregular como “llamadores”, lo cual reiteró, va contra el Código de Convivencia Urbana.
“No es una decisión fácil llegar a la clausura porque afecta a trabajadores que no siempre son responsables de las conductas de sus empleadores, pero se habían superado todos los límites. Además, se detectaron irregularidades de índole policial y hubo detenidos”, precisó Lucero.
Se trata de un incidente que ocurrió el martes por la tarde, cuando uno de los “llamadores” se trenzó en una pelea con un vendedor ambulante en la esquina céntrica de General Paz y Lisandro de la Torre. Como consecuencia del hecho, uno de ellos golpeó al otro con una piedra y este otro sacó un arma blanca. Ante la intervención policial, uno de los individuos fue detenido mientras que el otro se dio a la fuga.
Desde entonces, la seguridad se reforzó en el área céntrica con presencia policial a toda hora. De cara al inicio de la temporada, Lucero anticipó: “Vamos a contar con el apoyo de Infantería para erradicar actividades comerciales ilegales y prácticas delictivas. Las esquinas de la ciudad son de todos los vecinos y turistas, no de unos pocos que se adueñan de los espacios públicos”, subrayó.
Respecto a los procedimientos, el funcionario explicó que a los vendedores ambulantes se les decomisará la mercadería, mientras que los comercios infractores que contraten a “llamadores” enfrentarán actas, multas y hasta clausuras.
Sobre el local que fue clausurado por el municipio, el funcionario señaló que acumulaba más de 20 actas de infracción y precisó que hay locales que realizan la misma práctica que ya suman más de 7 millones de pesos en concepto de multas.
Además, destacó que muchos empleados de estos locales se encontraban en condiciones laborales precarias.
“Nos preocupa la explotación y la irregularidad con la que se maneja parte de esta gente, aprovechándose de la situación económica de muchos argentinos. Por eso recordamos a todos los comerciantes que deben actuar con responsabilidad, especialmente ahora que se aproxima un fin de semana largo en noviembre y la temporada de verano”, concluyó Lucero.
