El Consejo Argentino de Oftalmología (Cao) emitió una serie de recomendaciones para proteger los ojos este verano.

Unas de ellas son: lavarse la cara con agua y colocar solución fisiológica para diluir el producto si ingresa protector solar en los ojos.

Usar anteojos con filtros solares.

Quitarse los lentes de contacto o usar antiparras en las piscinas.

Proteger los ojos de las chispas del carbón al hacer un asado.

Los areneros suelen ser otro de los problemas más comunes en el verano, ya que el viento puede provocar que la arena ingrese a los ojos, generando malestar e irritación.

Ante casos como estos, una oftalmóloga del Cao recomendó “tener siempre solución fisiológica a mano y colocar en los ojos unas gotas, sin fregar la zona con los dedos”.

“Es fundamental cuidarse del sol con gafas de protección solar, ya que evitan que la exposición provoque irritación ocular y ardor tiempo después. No es recomendable leer a pleno sol, ya que los rayos inciden directamente sobre la mácula y la luz muy intensa produce daños en los ojos”, sostuvo la oftalmóloga del Cao.

Además, precisó que “se deben usar anteojos con filtros solares” que “deben tener filtro UV, UV400 o UV total, y pueden ser polarizados”. También remarcó que es importante comprarlos en ópticas y no en puestos de la calle o kioscos.

En relación a las infecciones como conjuntivitis, la Cao aclaró que si alguien la posee y se refriega los ojos y luego toca superficies puede contaminar objetos y a personas. Es por eso que subrayó que el punto, para no contaminar al resto, es que aquellos que presenten síntomas de conjuntivitis no concurran a colonias de vacaciones, ni piletas de natación.

También recomendaron, cuidarse del humo en las fogatas; de la espuma utilizada en carnaval; de las picaduras de insectos que pueden infectar la zona y necesitar antibiótico oral y de los golpes en la zona del párpado.

Por su parte, Celeste Mansilla, médica especialista en Oftalmología Infantil y miembro del Cao remarcó que “la consulta rápida es clave”, ya sea por un golpe o basurita en el ojo porque de esa manera se puede evitar un traumatismo ocular importante.