Luego de las fuertes protestas que se dieron la semana pasada en contra de la zonificación minera en Chubut, el gobernador de esa provincia, Mariano Arcioni, derogó la ley y llamó a un plebiscito.

Días atrás había manifestado ante medios locales: “Jamás doy un paso atrás en la vida cuando estoy convencido de lo que hice”, pero finalmente decidió vetar la normativa e impulsar el voto popular para “escuchar a todas las voces del pueblo”.

El proyecto proponía la explotación minera con regalías al gobierno provincial de Chubut pero como contracara, organizaciones ambientalistas y científicos del Conicet planteaban que esto ocasionaría graves daños ambientales por la utilización del xantato y la policriamida, dos componentes sumamente contaminantes.