Durante varios años, Juan Basgall fue uno de los encargados de guiar a los miles de turistas que visitaron el Cerro de la Cruz, en Villa Carlos Paz. Pero un día decidió seguir sus instintos, y comenzó a diseñar una hoja de ruta que lo convertiría a él y a su bicicleta como principales protagonistas.

Como guía de turismo profesional, la curiosidad por viajar, conocer y aprender de los distintos lugares es algo que lleva adentro; pero jamás se imaginó que a dicha aventura la emprendería en bicicleta. Y así fue; unió su afición por los deportes y su profesión, y comenzó a visitar las distintas ciudades que integran los valles de Córdoba, hasta que en diciembre emprendió su gran desafío: recorrer la Patagonia Argentina con su bicicleta.

“Fueron aproximadamente entre 1200 y 1500 km de cordillera pasando por 5 Parques Nacionales, y finalicé el recorrido en el mar, en Puerto Madryn”, comenzó a relatar Juan; a la vez que aclaró que al viaje no lo inició en bicicleta desde Carlos Paz, sino que el recorrido a pedal tuvo inicio en el sur.

“Bici didáctica”

Lo cierto es que la idea no sólo fue viajar por viajar, sino promover el proyecto de la “Bici didáctica”, el cual según explicó, “consiste en utilizar la bicicleta como un recurso didáctico para el aprendizaje; en mi caso personal por todo lo que uno va experimentando en el viaje. Además, todo lo que vivo lo comparto en una página de Facebook; entonces la idea es que la gente pueda viajar y aprender conmigo a través de las redes sociales, y contagiar la modalidad”.

Y continuó: “Creo que el hecho de viajar hace que uno crezca como persona. A mi me toca vivirlo en bicicleta, y al ritmo del pedal voy conociendo cultura, recursos naturales y todo lo que hay a mis alrededores. Uno previamente ve y planifica el recorrido por las rutas que va a ir, los kilómetros que hay entre localidad y localidad; lleva toda una logística el hecho de hacer un viaje en bicicleta”.

“Es un viaje de ida”

Juan rescató lo positivo de poder animarse a vivir este tipo de experiencias; pese a las adversidades que puedan llegar a surgir.

“Hay momentos en el viaje que te toca viento en contra o de costado, tierra, cansancio, falta de agua; y eso es lo que lo convierte en aventura y el hecho por el cual a uno le guste afrontar esto. Porque cada situación te deja un aprendizaje, y detrás de cada lucha viene lo más importante, que es el contacto con la gente, la diversidad cultural en los diferentes lugares que recorres y fundamentalmente los gestos humanitarios de la gente que se acerca”, señaló.

Hoy se encuentra nuevamente en Villa Carlos Paz comenzando un nuevo ciclo lectivo, ya que también se desempeña como docente. Pero inquieto y pergeñando una nueva ruta que lo llevará en los próximos meses a recorrer el norte argentino.

Conocé más sobre su recorrido: