Este viernes al mediodía, Gissell Coussan y Javier Ghirardi, militantes por la defensa de los Derechos Humanos, comparecieron ante la Jueza de Paz de Icho Cruz para ofrecer su descargo sobre la denuncia realizada por la jefa comunal de Cuesta Blanca, Andrea Jordán, quien le pidió a la Policía que frenara las pintadas de pañuelos de las Madres de Plaza de Mayo.

La jueza Laura Giavay Waiss escuchó durante más de una hora los argumentos de los militantes, mientras en la puerta de la sede comunal de Icho Cruz vecinos autoconvocados, organizaciones sociales, integrantes de fuerzas políticas y el legislador Ezequiel Peressini reclamaban justicia y reprochaban la actitud de la presidenta de la Comuna de Cuesta Blanca.

“Fuimos citados por la jueza y nosotros manifestamos que fue una pintada realizada aquel día (25 de marzo) por más de 50 vecinos autoconvocados. Le recordamos que no fue una iniciativa que surgió de nosotros, sino que inició a nivel nacional en el marco de la conmemoración de un nuevo aniversario por el Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia”, manifestó Gissell Coussan a Carlos Paz Vivo!

“Le hicimos saber a la jueza que la denuncia no tuvo por objetivo cuidar el bien público sino que se trató de una persecución ideológica, de querer callarnos, de obligarnos a olvidar lo que sucedió en nuestro país durante la Dictadura”, agregó.

La militante señaló que la jueza entendió que “no se trató de un daño ni de nada premeditado en contra de nadie, sino que fue una iniciativa local de una propuesta nacional”.

La jefa comunal de Cuesta Blanca, Andrea Jordan, no retiró la denuncia por aquellas pintadas y los vecinos autoconvocados exigirán que lo haga, para luego solicitarle unas disculpas públicas por lo que ellos entienden como una persecución ideológica.