PhoTortul 1562
“Volver al Bernardo”
Quinta del Niño Dios – Villa Carlos Paz
2 de Septiembre de 2019

Una niña sale corriendo, tras cruzar el pétreo arco, rumbo al automóvil de sus padres, certificando aquella estrofa del Nano Serrat que dice:

“…y Uno es feliz como el niño cuando sale de la escuela”. #Findelazita

Pero más allá de la niña -llamativa y revoltosa- de la PhoTortul de hoy, estamos aquí porque el protagonista central es el señor que yace plácido a la izquierda de la imagen a ‘solysombra’.

Este señor, de 76 años bien llevados, que posa para la foto sentado en la misma piedra del conjunto arquitectónico de inequívoca herencia jesuitica, es Pablo.

El Profe Pablo.

A decir verdad es Francisco Pablo Calamita, que vuelve a su querido Instituto Bernardo D’Elía…a pedido de la Institución educativa que se apresta a cumplir 6 décadas de vida lectiva y que decide repasar su historia, entrevistando a sus verdaderos protagonistas.

Y el Profe Calamita es el primero de un ciclo de reportajes que, junto a la profe Valeria y a la directora Alejandra nos disponemos a realizar, apoyados en video.

Una vez adentro de la sala de Dirección, los recuerdos brotan en ráfagas. Las anécdotas también se suceden una tras otra. Los nombres de colegas, de docentes, de administrativos, de sacerdotes, de catequistas…de maestranzas. Y porque no decirlo, algunos recuerdos amargos también…relacionados con un final trunco de su trayectoria en esta Institución Parroquial.

Muchos años de docente en este colegio, el del patio mas bello, sin dudas, el de las arcadas perimetrales perfectas. Otros tantos años de director, elegido entre sus colegas, de manera inédita por esos tiempos. Y tiempo también de carreras terciarias que eran promesa de salida laboral en los tempranos 90s.

Trabajo, Paz y Pan. En ese orden o en cualquiera.

Este Gringo, nacido en Bari, en el sur de la bota italiana en plena Segunda Guerra Mundial, y que pisó tierra Argenta tras 3 días sin comer…se atragantó de argentinidad…y es por eso que valora esta Tierra Bendita, de oportunidades como pocas.

Y por eso la Paz, el Pan y el Trabajo fueron y son su obsesión…y este presente que le duele…como a todo buoncristiani.

Filósofo de la vida. Profe de Matemáticas casi de casualidad. Novio, esposo, amante y ‘baboso’ (SIC) de Eva…su gran mujer:

-Cada día la amo más…y la admiro profundamente; nos cuenta a los 4 (porque se sumó el profe Jorge Álvarez), sin ponerse colorado.

-Con cinco hijos nos vinimos de Buenos Aires a Icho Cruz…y luego a esta Villa hermosa donde nació el último Calamita. Un solo cordobés en mi media docena de hijos”.

Al terminar la nota y volver hacia el auto, cruzamos todos el patio entre recuerdos de docencia y de parroquia…y de puertas cerradas también.

En lo personal (que pasé toda mi escolaridad en el IES) recuerdo muchas filmaciones en este colegio, con Pablo de Director…haciendo los vídeos de fin de año.

Pablo Calamita dio Matemáticas en casi todos los Colegios de la Villa, públicos y privados, laicos y parroquiales, también recuerda especialmente el de Malagueño donde empezó, gracias al padre Carlos Marella. Antes vendió quesos y fiambres…y cuando tuvo que dejar obligado la dirección del Bernardo D’Elía y solo le quedaron unas “horitas” en el nocturno del IES, no lo dudó: se calzó un delantal y se puso a laburar en una pizzería que montó gracias a la ayuda de su hijo y su hermano: la recordada “Pizzeria Valentina”, en la San Martín, cerca de la Cana. Inolvidables manjares cuando el delivery estaba en pañales y Pedidos Ya ni en novela de ciencia ficción. Había que ir a comprarla allí…y llevarla a casa.

Pero Francisco Pablo Calamita siempre será recordado, en esta Villa, como ‘El Profe Pablo’.
Al principio de esta aventura evocativa, un par de horitas antes, antes de la foto en el arco de piedra, al bajarse de mi Renoleta…un cuarentón que venía caminando, se desprende de su pareja y le da la mano cordial, afectuosa y mirando a su mujer le dice: por este hombre…por el profe Pablo…Yo estudié lo que estudié …y hoy soy lo que soy.

La mujer nos sonríe y ambos se van…sospecho que recordando tiempos de secundaria en El Bernardo.

Es lindo volver al Cole.

El Bernardo va a cumplir 60 años, y se apresta a contar esta historia.

Qué lindo verlo a Pablo cruzar ese patio otra vez…y qué lindo ser testigo invitado, con mi tercer ojo, de este momento…y poder contarlo.

El patio del Bernardo y Pablo…poder contarlo.

#Pablo Calamita

#InstitutoBernardoDElía

#EscuelasParroquiales