Getty Images

Casi 700 personas fueron detenidas desde este martes en París y Nanterre, una localidad cercana a la capital francesa, a raíz de los disturbios que se generaron tras el crimen de Nahel M., un repartidor de 17 años que fue ultimado por una bala policial.

Ana Chiabo es cordobesa, tiene 33 años y vive en París desde hace 8 años a donde llegó para estudiar Literatura, traductorado y se está especializando en Derecho Público Francés.

En diálogo con Carlos Paz Vivo relató cómo se vive en la capital francesa bajo un virtual toque de queda que se inicia todas las noches a las 21 horas.

“El problema empezó porque a un chico que es de una ciudad que está pegada a París lo paró la policía para un control y lo que pasó fue que un policía lo apuntó con un arma y el chico aceleró. El policía le disparó y lo mató”, relató Ana.


Y agregó que el policía fue detenido pero empezaron los disturbios que no se logran controlar por las fuerzas policiales. Ana contó que la violencia es más notoria en los suburbios de París y en las ciudades que están alrededor de la capital.  “Se dan sobre todo en Nanterre, en donde vivía el chico”, expresó la cordobesa radicada en París.

“Quemaron comisaría, municipalidades y todo los que se le cruzaba por el medio como los autos. Después empezaron a a abrir supermercados, a robar mercadería y lo que pasó fue que anoche (por el jueves) ya empezaron a a entrar a París y y fueron al centro de la ciudad a robar cosas de las tiendas”.

Las acciones de Macron

La mujer cordobesa afirmó que el presidente Emmanuel Macron llamó a la paz social y este viernes reunió a todo su gabinete para evaluar las acciones a seguir. Una parte de la opinión pública le demanda que ordene la intervención del Ejército para normalizar  situación .

“Macron salió y les pidió a los padres que cuidaran a sus hijos para que no salgan a hacer cualquier cosa”, detalló Ana Chiabo y siguió: “Además, dijo que esto es culpa de las redes sociales y de los videojuegos.

La vida en el caos

Ana le contó a Carlos Paz Vivo que tuvo que adecuar su vida a esta problemática que se vive en las calles. Apuntó que trató de alejarse de los lugares conflictivos. “Acabo de volver de cenar,  estábamos en un restaurante y fuimos caminando. Volvimos y se escuchan sirenas porque vivo al lado de una comisaría y hace dos días que escucho entrar y salir sirenas de los autos de la policía”.

“A mí no me ha cambiado mucho la vida justamente porque vivo en esta en esta parte de París”, expresó la cordobesa que apuntó que trata de ajustar sus horarios al virtual toque de queda que se plantea en las noches.

Ana dijo que piensa que Macron tomará medidas más drásticas en las próximas horas. “Si esta noche se va todo de las manos ya van a tener que ver qué hacen y para mí están analizando establecer un estado de urgencia para que puedan intervenir los militares”: