El animal salvaje acecha un barrio de California, Estados Unidos, para conseguir satisfacer su refinado gusto

De acuerdo con lo informado por INFOBAE, en Monrovia, un barrio en Los Ángeles, California, Estados Unidos, un ladrón peludo captó la atención de los medios y residentes por su gusto peculiar: las galletitas de marca Oreo. Este oso, apodado justamente “Oreo”, ha sido visto en varias ocasiones dentro de casas en busca de su cookie preferida.

Durante este mes, Oreo entró en una vivienda ubicada en Canyon Crest Drive y logró llevarse una bolsa de las reconocidas galletitas. “Por eso lo llamamos Oreo”, comentó Vina Khoury a KTLA 5.

Las cámaras de seguridad capturaron al oso mientras salía por una ventana lateral con el paquete de galletas en la boca, video que fue publicado por ABC 7.

El día siguiente de haber sido agarrado con las manos en la masa -o mejor dicho, con las garras en las galletitas-, el oso fue visto nuevamente en Monrovia con otro paquete de Oreos.

Al respecto, Khoury añadió: “Ahora que irrumpió en la casa, da un poco de miedo. Siento que no puedo dejar una ventana abierta ni siquiera con una reja porque literalmente la quitó, así que eso es un poco alarmante para mí”.

Esta conducta del oso no es nueva para el barrio. El año pasado, Khoury dejó abierta la puerta de su garaje y Oreo entró para robar un pastel de chocolate. Al revisar su heladera, Khoury vio que había sido saqueado por el mismo oso. “Estamos muy acostumbrados”, remarcó.

Y explicó que más allá de los robos, no representan un mayor peligro: “Nunca antes habíamos oído hablar de un ataque de osos aquí, pero aun así, cuando están demasiado cerca o cuando es una mamá osa con sus pequeños, no quieres estar demasiado cerca de ellos ni asustarlos porque no sabes cuándo van a atacarte”.

Los habitantes de Monrovia suelen vivir en proximidad con la fauna local, que incluye coyotes, ciervos y, claro, osos como el simpático Oreo. Según el sitio web de la ciudad, el principal objetivo de las llamadas a emergencias por avistamientos de animales salvajes es “permitir que el animal abandone el área y regrese a las colinas”.

Sin embargo, el caso de Oreo sorprende por su constante y específico gusto por esas galletitas. El antojo es más fuerte que él. “Una vez logró abrir el auto de un vecino y sacó la bolsa de compras. De ahí consiguió una caja de Oreos”.

Si bien para unos pocos el comportamiento es agresivo y peligroso, para otros es algo simpático y cómico. Richard Mosteller, otro vecino del barrio asaltado por Oreo, dijo: “Los osos vienen todos los lunes. Pasan y golpean los botes de basura, buscan comida y son bastante inofensivos”.

Según destaca Infobae, la creciente astucia del oso ha hecho que algunos consideren la reubicación de Oreo para proteger tanto al animal como a los residentes. Por ahora, el astuto ladrón logra escaparse de la ley y no cumple ninguna condena. Sigue haciendo de las suyas y disfruta de su galletita favorita.

 

 

Fuente y foto: Infobae