El nadador carlospacense de aguas frías hoy hizo el primer cruce en el Lago Titicaca, conmemorando los seis años de su accidente automovilístico que lo dejó parapléjico pero que no le cortó las alas para volar, soñar y derrumbar barreras.
El estrecho de Tiquina del Lago Titicaca – también conocido como Puma de piedra- que está a 3.850 metros sobre el nivel del mar fue el escenario elegido por Santiago Gutiérrez y su equipo Carlos Nieto y Julio Duret, para conmemorar los seis años en el que el deportista sufrió un accidente que lo dejó sin movilidad en sus piernas. Eso no fue un impedimento y el deporte fue su bandera principal para poder llevar su mensaje lleno de vida y superación, cruzando el Lago San Roque y quebrando barreras con su proyecto el “Río nos une”, uniendo a nado todos los países limítrofes de Argentina.
“Al mediodía logramos a hacer el cruce, en el medio del festejo de los seis años del accidente. Un festejo a la vida, un festejo a la oportunidad de Dios de estar haciendo lo que puedo hacer. Lo hicimos a un ritmo súper tranquilo, es una altura donde no podes exagerar movimientos no podes agitarte. Es bien complicado”, declaró a Carlos Paz Vivo.
El carlospacense ya se encuentra en otra ciudad y mañana hará el reconocimiento en el lugar del cruce. Será el 2 de diciembre y unirá Perú con Bolivia partiendo de la Bahía de Yunguyo, con 4000 metros por recorrer.
Sin dejar de pensar en el futuro, Gutiérrez ya tiene firme su próximo objetivo. “Estamos haciendo el lago más alto del mundo, en junio vamos a ir al lago más bajo del mundo: el Mar de Galilea de Israel.