Una pareja de San Francisco, al este cordobés, desconocían que estaban esperando una beba, que finalmente nació con 38 semanas de gestación.

Valentina, su madre que no tenía síntomas propios del embarazo ni panza, relató que que el 3 de agosto por la mañana, empezó a sentirse mal y llamó a una médica que al oscultarla se dio cuenta que ella estaba embarazada.

“La doctora que vino a mi casa me empezó a tocar y me preguntó de cuántos meses estaba. Le dije que no estaba embarazada, pero ella me dijo que le parecía que sí”, señaló. Así es que fueron hasta el consultorio y a las pocas horas estaba dando a luz.

La pequeña a la que llamaron Fiorella, pesó 3 kilos y goza de muy buena salud. “Sentí un corazón que latía, pero no tuve tiempo de nada. A los 10 minutos estaba en la sala de parto y en otros 10 minutos ya la tenía en brazos a mi hija”, narró Valentina y completó: “Decimos que fue un embarazo de cuatro horas porque nos enteramos de esa manera”.