En el barrio de Floresta Alta, en Salta capital, una mujer denunció que fue violada en su hogar por el policía que debía custodiarla tras recibir amenazas de muerte en el marco de una causa por violencia de género.

“Vino un señor a las 22.30 a cuidarme. A las 23.30 me pidió permiso para retirarse. Estaba con mi hermana jugando naipes. Ella se va a la 1.30 y a las 2 me acuesto. Antes, le di lugar al policía para que se quede en el comedor y le puse la tele para que no se duerma, porque supuestamente me estaba cuidando”, contó la víctima a El Tribuno.

La mujer explicó que luego el policía entró a su habitación sin ropa, la amenazó con una pistola contra la cabeza y la abusó. La víctima pudo dar aviso de lo sucedido cuando cerca de las 4.30 un suboficial, identificado como F.G, pasó a verificar la tarea del custodio.

Según el informe policial, el suboficial F.G, al observar que no había nadie en la puerta de la casa, bajó del patrullero y vio que la mujer salía corriendo de la vivienda y le contó lo sucedido. Tras ello admitió que el agente que la violó “se terminó de cambiar afuera” y se ató las botas frente al suboficial.

Tras la denuncia de la mujer, el policía finalmente fue detenido y la Justicia investiga el hecho.