Dos abuelos, su hija y su nieto fueron atacados y heridos por su perro en Malagueño, tras lo cual decidieron matarlo “para evitar una tragedia” porque había más niños en la casa. En Carlos Paz existe una ordenanza que obliga al registro de los animales potencialmente peligrosos.

Desde el 5 de julio de 2018 está en vigencia la Ordenanza municipal 6369 que, además de establecer al municipio como “no eutanásico”, procura un control y equilibrio poblacional de perros y gatos” en nuestra ciudad, dada la problemática de superpoblación de animales que afecta la salud y seguridad públicas.

En específica referencia a los “animales potencialmente peligrosos”, como se los considera según esta ordenanza, la legislación establece en su Artículo 11 el registro de identificación donde deben quedar asentadas obligatoriamente las características del animal. Además, esta identificación en el registro tendrá un costo monetario para sus dueños.

El Artículo 12 señala que son considerados “perros potencialmente peligrosos” aquellos que presenten una o más de las siguientes características: “los que hayan tenido episodios de agresiones a personas u otros animales; los que hayan sido adiestrados para el ataque y la defensa; los que pertenezcan a una raza o sus cruzas que reúnan las características o comportamientos que, de acuerdo a la evaluación de la autoridad de aplicación, ameriten dicha consideración, la que será realizada en un marco etológico (comportamiento animal)”.

Dicha ordenanza estipula multas que oscilan entre 1.000 y 15.000 pesos a las infracciones relacionadas con la tenencia de perros potencialmente peligrosos.

Factores que inciden en su peligrosidad

El reconocido médico veterinario carlospacense, Guillermo Bur, consultado por Carlos Paz Vivo!, señaló que “por sus características molosas, con fauces con mucha capacidad de presión”, los perros raza rottweiler, pitbull, stanford terrier, bull terrier, dogo argentino, mastin napolitano, bullmastiff, entre otros, son potencialmente peligrosos.

“Lo que potencia la peligrosidad de los animales son las cruzas que se dan en forma descontrolada”, afirmó Bur.

Pero hay más factores, además de la genética, que inciden en la peligrosidad de los perros: “Hay una cuestión ambiental que es la manera en que crían los dueños a los animales. También hay una cuestión psiquiátrica: entre un 8% y un 10% de la población de todos los animales domésticos tienen enfermedades psiquiátricas que provocan, por ejemplo, hiperactividad o hiperagresividad, lo que los vuelve peligrosos. Por otra parte, los machos se ponen mucho más intolerantes cuando hay una hembra en celo”, dijo el médico veterinario.