Los damnificados son los integrantes de una familia de Sol y Río. Los ladrones aprovecharon cuando se fueron a trabajar, ingresaron, revolvieron todo y se llevaron hasta una motocicleta.
El miércoles pasado en las primeras horas de la mañana, la familia de Claudia Diotto, salió a trabajar como lo hace habitualmente. Ese día, después de mucho tiempo, a su hijo de 15 años le tocó asistir al colegio.
Aprovechando que los propietarios de la casa ubicada en Emilio Caraffa al 200 en barrio Sol y Río, no estaban, los delincuentes palanquearon la puerta de atrás e ingresaron.
Claudia Diotto contó que los vecinos “vieron algo raro cerca de las 9.30”, pero creyeron “que era mi marido quien estaba”. Y agregó: “Alcanzaron a ver a dos chicos que subían corriendo hacia mi casa, porque está como en una loma, más alta que la calle”.
Luego vieron salir a alguien con la moto y el casco puesto.
El hijo de la mujer llegó cerca de las 14 a la casa y encontró el portón abierto y decidió ir a buscar a un vecino para que lo acompañe a ingresar a la casa. Cuando entraron se encontraron con que estaba todo revuelto, y ahí se dieron cuenta que habían robado.
La damnificada comentó que se llevaron todo lo que pudieron. “Se robaron mucha ropa de hombre, perfumes, a medida que voy acomodando y necesitando cosas, me doy cuenta lo que falta y se llevaron. De a poco voy acomodando porque me da mucha impotencia y lo que hicieron fue con mucho daño. Todo lo que es de mujer no lo tocaron”.
Resaltó que tiene un cajón con remedios y abrieron todas las cajas, “seguramente” buscando dinero.
“Nosotros consideramos que nos estaban espiando y sabían nuestros movimientos, porque mi hijo está siempre en mi casa porque no iba a la escuela. Al parecer fueron dos y uno se fue en el vehículo y el otro caminando”, indicó.
Además de robar una notebook, parlantes, maquina de cortar pelo, entre otras cosas, se llevaron la moto. “Es lo que más lamentamos, a mi me cortaron las piernas porque la uso para trabajar, estaba impecable”.
La mujer dijo que las consecuencias psicológicas que genera un robo, “son horribles”. Detalló que eligieron ese barrio “porque era tranquilo y los chicos podían jugar en la plaza. Estos nos deja mucha inseguridad, mi hijo tiene 15 años y no quiere quedarse solo, nadie quiere salir, cuando abrimos la puerta de la calle nos da miedo. Laburamos tanto para que en dos minutos te roben todo, no solo lo material, tu intimidad también”.
La familia busca datos de la moto Honda Biz patente KUT 149, de color roja. Cualquier información comunicarse al teléfono 3541-540927
