En los últimos días, en el cementerio de San Vicente, en la capital de Córdoba, se hallaron a diversos ladrones robando placas de bronce y floreros de aluminio en diferentes días.

Claudia Romero, directora de ese cementerio, recomendó ante la prensa la colocación de placas de cerámica. “Estamos pidiendo a los dolientes que coloquen placas de cerámica, porque creemos que de esa manera no se las van a sustraer”, manifestó.

Por otro lado cámaras de seguridad captaron hombres en el mismo barrio robando un baño químico. Uno de ellos lo devolvió días después porque su hijo lo vio por televisión.

También en este año hubo por lo menos 150 ataques a postes de luz y robo de cables de alumbrado y de teléfono.

Además, las compañías de seguros vienen registrando un aumento en las denuncias por robo de cubiertas de autos, baterías y hasta rotura de cristales.

El kilo de algunos metales puede ser revendido por 1.000 pesos y algunas cubiertas de autos más de 50.000, por lo que se han convertido en robos de moda.  Estos casos están lejos de ser hechos aislados, son las nuevas modalidades delictivas que están sucediendo en Córdoba capital y que preocupan al resto de los municipios.