Este viernes por la mañana, los trabajadores del a Cooperativa Integral volvieron a marchar por las calles de la ciudad en reclamo por el traspaso del servicio de agua potable al municipio.

Mientras se siguen realizando las fiscalizaciones por parte de funcionarios municipales en dependencias de la Coopi, los trabajadores piden por su continuidad laboral.

La disputa se trasladó, en ese sentido, al Ministerio de Trabajo de la Provincia que deberá mediar entre las partes.

Para el municipio, el primer planteo del gremio hablaba de unos 150 trabajadores mientras que el SIPOS señala que son cerca de 260 los puestos laborales que están en juego.