Las fiestas clandestinas en domicilios particulares y espacios públicos se convirtieron en uno de los problemas más frecuentes de los fines de semana durante la cuarentena; pero vecinos de diversos sectores de la ciudad advierten que hay conflictos similares que van más allá del comienzo de la pandemia, sino que data de mucho tiempo antes, incluso años.

Juntadas en espacios públicos, música a todo volumen, gritos, corridas, caños de escape libres y basura de todo tipo, es lo que denuncian que sucede cada fin de semana los vecinos de Playa Esmeralda, por un lado, y la Costanera, por otro.

Oscar Arcas, uno de los damnificados de la zona de Playa Esmeralda, contó a Carlos Paz Vivo!: “En los últimos tiempos es insoportable, porque vienen con muchos autos y el lio que arman es insoportable. El viernes pasado había como veinte autos; y vienen, estacionan, abren los baúles y ponen música, cantan y beben. Pasan toda la noche y hacen picadas. Eso ocurre viernes y sábados e incluso algunos jueves”.

En este sentido, el hombre sostuvo que “la Policía y la Municipalidad siempre nos dicen que llamemos; pero pasa siempre lo mismo: vienen los móviles, les hablan a los chicos y a veces se van; pero después vuelven y nos pasamos sin dormir todo el fin de semana”.

Por otro lado, Irene Merlo -también vecina del sector-, comentó: “Estoy con un tratamiento oncológico y tres veces por semana tengo que salir a decirles que dejen de hacer ruido y se vayan porque es algo imposible de aguantar, ya que se juntan prácticamente debajo de mi dormitorio. Esto desde hace años se convirtió en un descalabro”.

La mujer, agregó que “no sólo se juntan y hacen ruido; sino que, además de que no nos dejan dormir, al día siguiente nos tenemos que poner a juntar toda la mugre y las botellas vacías que dejan”.

E indicó: “Si nos juntamos es porque estamos cansados. A quien sea responsable de esto, les pido que humanamente hagan algo, porque con mi tratamiento no puedo estar sin dormir tres noches por semana. Y no le echemos la culpa al verano ni a los turistas, porque es gente de acá”.

Por su parte, Hugo Bergese también hizo referencia a la problemática y llamó a la reflexión: “Nosotros no estamos contra la felicidad de los chicos; que ellos hagan lo que quieran, pero que no molesten y sean respetuosos de nosotros, que también tenemos derecho a ser felices y a descansar”.

 

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El otro punto: La Costanera

Sebastián Chevalier, vecino de barrio Santa Rita y próximo a la Costanera del lago San Roque, manifestó que “desde hace varios meses los inconvenientes con los ruidos molestos, escapes de vehículos y música a gran volumen, son cada vez más. Con los vecinos del sector venimos haciendo reclamos y, a veces envían a alguien, otras no; pero esto no para. Al principio de la cuarentena se calmaron; pero después volvió a ser lo mismo de antes”.

En cuanto a las picadas, dijo que no se dan de esa manera por el hecho de que no son competencias; pero señaló que los vehículos y motos aceleran, hacen patinar y escarbar los neumáticos.

En este sentido, sostuvo que el pasado lunes mantuvieron una reunión con el secretario de Gobierno Darío Zeino, el director de Seguridad Roberto Giménez y autoridades de la Policía.

“Se comprometieron a partir de este fin de semana intensificar los controles”, apuntó el vecino al referirse a los resultados del encuentro.

Desde Carlos Paz Vivo! se conoció que en las últimas horas, las autoridades de la Unidad Regional Departamental Punilla se reunieron con Jorgelina Gómez, a cargo de la Fiscalía de Instrucción N° 3, para evaluar las acciones a seguir en relación a esta problemática.

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