Ocurrió en Berisso, provincia de Buenos Aires, donde el malestar entre los internos por la quita de celulares y algunos posibles traslados generó varios disturbios. La fuerza policial controló la situación, aunque dos agentes quedaron internados por haber aspirado gases en el incendio.

16 presos se amotinaron e intentaron fugarse en la noche del sábado de una comisaría ubicada en la localidad bonaerense de Berisso, aunque fueron controlados por los agentes policiales, de los cuales dos sufrieron graves heridas y se encontraban hasta este domingo por la tarde internados en terapia intensiva en un hospital local, informaron fuentes policiales.

De acuerdo con lo informado por fuentes policiales, los incidentes se registraron cuando un grupo de presos intentó fugarse. Según los voceros, el malestar entre los internos se generó tras la decisión de trasladar a algunos presos y quitarles celulares con los que estaban generando extorsiones.

Ante tal situación, los amotinados causaron destrozos en las celdas y prendieron fuego algunos objetos.

Tras ser llamados de urgencia, los Bomberos Voluntarios de Berisso acudieron al sitio y pusieron bajo control las llamas, evitando que las mismas se propagaran por las instalaciones de la comisaría y otros domicilios de la zona.