El ex boxeador de 53 años Mike Tyson publicó en 2013 su autobiografía titulada Undisputed Truth, donde reveló muchos secretos de su vida deportiva hasta confesar que en la mayoría de sus peleas subía drogado al ring.
En esta ocasión y en diálogo con la cadena ESPN, el campeón del mundo de los pasados contó cómo pasaba el control antidoping utilizando un “pene falso” y la orina de sus hijos para que no detectaran sustancias prohibidas por la competencia en su cuerpo.
“Yo solía usar la orina de mi esposa y entonces ella me decía que cuando salgan los resultados me iban a decir ‘Señor Tyson, está embarazado’, entonces, mejor comencé a usar la orina de mis hijos”, confesó Mike Tyson.
Sin embargo, en su autobiografía detalló qué sucedió la vez que dio positivo por marihuana en su combate frente a Andrew Golota en el año 2000. Luego del combate, los miembros de su equipo no llegaron a tiempo para darle el pene falso con la orina limpia.
Por último, el ex campeón tiene un vínculo muy fuerte con el cultivo de cannabis, por ello afirmó que preferiría consumir marihuana antes que los calmantes convencionales: “Yo tomaba esas pastillas, todo eso para el dolor y casi me vuelvo loco. Era como un zombie, dejé de usarlas y usaba cocaína. Después dejé todo y empecé a fumar marihuana y me limpié, así fue como empecé a vivir una mejor vida”.
