Barcelona FC puede no permitir la salida del argentino pero esto no impediría, así sea Manchester City, PSG, Inter o cualquier otro equipo, que Lio pueda jugar en otra asociación del fútbol mundial.
La situación de Messi se resuelve en dos terrenos distintos, el deportivo y el económico a través de una cláusula de rescisión. Marcelo Bee Sellares, especialista en Derecho Deportivo, brindó su punto de vista sobre el tema.
“En el aspecto deportivo el jugador se apresta a conseguir el certificado de transferencia internacional (CTI) provisorio para poder ser inscripto en otra asociación y poder jugar en otro club. Antes le comunicó a las autoridades su decisión de hacer uso de la cláusula del contrato de trabajo que estipula su resolución y brinda la posibilidad de desvincularse y pasar a ser jugador libre”, resalta Bee Sellares que también aportó estos conceptos:
“Ante la negativa del Barcelona a conceder el CTI, el jugador apelará directamente a la FIFA para poder obtenerlo, y en este sentido, la jurisprudencia del ente que regula el fútbol mundial y el Tribunal Arbitral Supremo del Deporte (TAS) lo avalan con numerosos antecedentes”.
Marcelo Bee Sellares.
“Desde la perspectiva económica, como principio general hay que decir que una cláusula de rescisión o salida se ejecuta al finalizar la temporada conforme el reglamento de la FIFA. Entonces, la disputa está centrada en el monto de la cláusula de rescisión o salida”.
“El jugador sostiene que lo avala una cláusula del contrato para resolverlo sin pagar ni un peso ya que si bien se fijaba como fecha el 31 de mayo (culminación de la temporada regular en España) con un plazo de 10 días para hacer uso de esta claùsula (el jugador no lo hizo porque la temporada no fue regular ni culminó el 31 de mayo). Este argumento del servicio jurídico de Messi se contrapone con el FC Barcelona que exige activar la cláusula de 700 millones de euros, argumentando la renovación tácita de la misma hasta 2021”.
“Conclusión, el jugador obtendrá el certificado de transferencia internacional provisorio emitido por la FIFA (es muy común en los conflictos por rescisión de contratos) y podrá jugar en otra asociación amparado por el resguardo legal que brinda el derecho a trabajar que tiene todo jugador”.
“Esta disputa económica (salvo que las partes lleguen a un acuerdo) se va a dirimir en la justicia ordinaria de Barcelona, jurisdicción donde las partes se someten ante cualquier diferencia que pueda surgir en el contrato”, concluyó Bee Sellares.