Alquilaron una cabaña en calle Honduras de nuestra ciudad. Al damnificado el hecho le resulta extraño por la modalidad que tuvo. Sospecha que el autor del robo tiene una copia de la llave del lugar.

Marcelo Vélez, es oriundo de Almafuerte y junto a su familia decidieron pasar unos días de vacaciones en nuestra ciudad. Alquilaron una cabaña en el complejo Timay, en calle Honduras 2366 de barrio El Canal.

Llegaron el domingo dispuesto a descansar, pero la primera noche, ingresó alguien a su cabaña y les robaron más de 200 mil pesos, entre otras cosas.

“Contratamos por Facebook la cabaña, llegamos el domingo a las 18. Ese mismo día estuvimos despiertos hasta las 3, y nos fuimos a dormir”, detalló el hombre. Agregó que no puso la alarma porque “estábamos nosotros adentro y pensé que no era necesario hacerlo. Solo cerré con llave y nos fuimos a los dormitorios que están en el primer piso”.

Señaló que a las 5 sintió “un ruido mínimo”, pero dijo que solo “agarre el celular y seguí durmiendo. Cuando me levanté, y fui a la planta baja, me encontré con la puerta abierta sin llave”.

Lo curioso para el hombre, es que no forzaron nada para entrar y resaltó “que lo raro,  es que cuando me fui a dormir me asegure de que estaba cerrada con llave la puerta”.

Y agregó: “Alguien tiene una copia. Se llevaron todo, una computador HP, que me la compre hace poco, mi billetera, miré debajo de la mesa donde había escondido una mochila con dinero, cerca de 200 mil pesos, también se lo robaron”.

Destacó que había muchas cosas de valor para llevarse, sin embargo agarraron justo esa mochila. “Tenían mucha información, cuando llegue saqué la plata de esa mochila, vieron que dentro de esto había bastante dinero”.

Señaló otro detalle que le llamó la atención, y es que encontró la billetera acomodada frente a las cabañas, dentro del predio. “Ningún ladrón se va a poner a sacar la plata frente a las cabañas y va a dejar los documentos, las tarjetas, no se toman ese trabajo”, dijo.

Las demás cabañas estaban ocupadas por familiares del dueño y personas conocidas de él, indicó. “El propietario nos dijo que nunca habían robado, siempre puso en duda lo que decía, de que me habían robado. Mientras por otro lado, me enteré por una prima de Carlos Paz que el hijo del dueño señaló que siempre sucede lo mismo en las cabañas de su padre”.

“Es todo muy raro”, comentó el turista, quien aseguró que debido a lo que le tocó vivir, no va a volver más a Carlos Paz.