El Tribunal de Goya, Corrientes, condenó a Leonardo Cositorto a 12 años de prisión tras declararlo culpable de los delitos de asociación ilícita y estafa, en el marco de la causa por la estafa piramidal de Generación Zoe. La fiscalía había solicitado una pena de 16 años, pero finalmente el tribunal impuso una condena menor.
Junto a Cositorto, también fueron sentenciados Miguel Ángel Echegaray, Maximiliano Javier Batista y Lucas Damián Camelino, quienes recibieron 8 años de prisión cada uno por su participación en la organización delictiva. En cambio, Nicolás Ismael Medina y Javier Sebastián Medina fueron absueltos.
La investigación determinó que Generación Zoe operaba como una estafa piramidal, captando dinero de inversores a quienes les prometían rendimientos del 7,5% mensual en dólares. En Goya, el esquema afectó a 98 personas, muchas de las cuales invirtieron todos sus ahorros, confiando en las falsas promesas de rentabilidad asegurada.
Este caso es el primero de varios procesos judiciales que enfrenta Cositorto en distintas provincias argentinas, como Córdoba, Santa Fe, Salta y Buenos Aires. Se espera que en los próximos meses se dicten nuevas sentencias en su contra.
Tras conocer la sentencia, Cositorto manifestó su intención de apelar el fallo, alegando falta de pruebas en su contra y cuestionando el proceso judicial. Sin embargo, el tribunal dejó en claro la magnitud del fraude y la responsabilidad del líder de Generación Zoe.
Con esta condena, la Justicia argentina marca un precedente importante en la lucha contra las estafas financieras, enviando un mensaje claro sobre las consecuencias de los fraudes piramidales y la captación de ahorros con promesas engañosas.





