En la fresca noche del viernes, Las Pastillas del Abuelo tocaron ante una Plaza de la Música que se mostró colmada en su habitual visita a la capital cordobesa.

“Tantas escaleras” abrió la grilla de temas, como un guiño a la historia de la banda y en continuado la chacarera “Perdido” también despertaba los sentimientos más íntimos para esos seguidores de fierro de la banda. Esto iba a ocurrir en varios momentos, ya que en esta oportunidad no sólo integraron los últimos temas de “Paradojas” sino que también agregaron aquellas canciones viejas y que solamente un claro seguidor de Las Pastillas puede corear como “El cowboy”.

“Piti” Fernández y su banda desplegó durante dos horas los diferentes matices de la banda. Desde los temas rockeros de “Osiris” e “Inercia” hasta “Permiso y Prometo” o “Historias” de melodías más apaciguas pero con una letra penetrante, como la mayoría de los temas de las “Pastis”.

¿Qué es Dios? y el pedido del mismo “Piti” de cuidar a Maradona. “¿Me juego el corazón?” y “Rompecabezas de amor” y la lista seguía con los clásicos y los nuevos: “¿Qué pretendo no saber?”, “Historias”, “Gobiernos procases”, “Skalipso”, “Absolutismo”, “Desde la postura”, “Locura y realidad”, “Otra vuelta de tuerca”, “Viejo Karma”.

Las Pastillas saben que viven uno de sus momentos más mediáticos, y los saben aprovechar. Cantando los temas de “Paradojas” calman la sed del nuevo público – que fue mucho- y con los viejos e inéditos a los “fanas” de hace más de 7 años.

Es una realidad de que ya no son el grupo que tocaba en Captain Blue, ahora ya están en un escalón firme y alto. Han crecido musicalmente como banda y la ventaja es que dentro de esos años el público fue creciendo y acompañando esa trasformación y evolución que le permite llegar e impactar a la generación adolescente argentina, y sobretodo en la cordobesa.

El show mostró todas sus facetas y la gente se fue agradecida. Otra fiesta pasó por Córdoba y Las Pastillas del Abuelo tienen vigente que su esencia esta en las venas.