El legislador de Encuentro Vecinal Córdoba, Rodrigo Agrelo, insistió este lunes en la necesidad de que se dé tratamiento un proyecto de ley que busca una “paulatina reducción de la población de estos animales” considerados peligrosos, tras una serie de incidentes trágicos que involucran a este tipo de perros en Carlos Paz, Córdoba y el país.
El pasado viernes 7 de noviembre una niña fue atacada por un perro de raza Dogo argentino, en barrio Miguel Muñoz B de nuestra ciudad.
El perro se había escapado de una vivienda y mordió a la pequeña que caminaba en el lugar con su familia. Horas más tarde, el dueño del perro pidió disculpas públicas por el hecho.
La agresión fue registrada por una cámara de seguridad y generó fuerte conmoción entre los vecinos de la zona, que aseguran que el animal ya había protagonizado otros episodios violentos.
“Hay que cuidar a las personas”
En relación al tema y al proyecto que presentó, en diálogo con Carlos Paz Vivo!, Agrelo enfatizó que la prioridad es “cuidar a las personas”, considerando al ser humano como “lo máximo que hay”.
La iniciativa surgió a raíz de casos como la muerte de Trinidad Ballesteros, una niña atacada por dos dogos cuyos dueños ya habían sido sancionados por mal cuidado de los animales. Agrelo señaló que las medidas existentes, como los registros de perros peligrosos y la prohibición de circular sin bozal, “no han dado resultado, evidentemente”, citando incidentes recientes en Carlos Paz y en otros lugares.
El proyecto de Agrelo propone prohibir la reproducción, venta y comercialización de perros potencialmente peligrosos, lo que implicaría la castración de estos animales. “El objetivo es reducir su multiplicación en la población. La castración podría ser realizada por cualquier veterinario, y los propietarios deberían contar con un certificado que lo acredite”, expresó el legislador. Y sugirió que estas razas solo deberían ser utilizadas por las fuerzas de seguridad, donde están sometidas a un régimen de cuidado y control profesional que minimiza los riesgos.
Agrelo argumentó que no todas las personas están capacitadas para la crianza de todos los animales, “ya que no todos poseen la destreza, el conocimiento y el temperamento necesarios para manejarlos”. Además, mencionó un estudio que encontró que nueve de cada trece ataques de perros potencialmente peligrosos a personas, fueron a individuos del círculo cercano del animal, con quienes tenían trato cotidiano. Asimismo, explicó que estos perros, al morder, a menudo no pueden soltar debido a las características de su mandíbula, la fuerza que ejercen y su estado de furia.
El legislador, quien se declara “bichero” y ha tenido perros toda su vida, aclaró que el proyecto no busca “quitar el perro a nadie”, sino avanzar en una política de reducción de la población de estas razas. Reconoció que el tema es delicado y que su propuesta se encuentra en minoría en la legislación, habiendo tenido dos debates en comisión sin encontrar muchos aliados. Sin embargo, afirma que ha decidido “cumplir mi función sin hacer demagogia”.
Por último, Agrelo sostuvo que a menudo las medidas se toman solo después de una tragedia, y que espera que su propuesta contribuya a prevenir futuros incidentes.
Habló el dueño del dogo: No encuentro palabras para pedir disculpas