En apenas dos semanas un local de comidas de barrio Argüello fue robado dos veces. Pero la historia no termina sólo ahí. En el primero de los asaltos, los delincuentes se olvidaron un celular, pero en el segundo, prendieron el horno, cocinaron, comieron y bebieron y luego le dejaron una crítica sobre las comidas.

“Hey loko. Pesimo la panada y ambugesa de 10. Dedicate hotracosa gei. Ades 10. La pizza no sé, fijate man, 5-5. Muy rica la sangría”, decía la nota que delincuentes escribieron luego de estar por varias horas en el local e incluso preparar sangría con el vino y el limón que usa el propietario para cocinar.

“El 27 de noviembre abrí la rotisería y la panadería para celíacos. A la semana siguiente, le entraron a robar a mi vecino y, a la segunda semana me roban a mí, como así también a un local que vende cuadros y a un quiosco”, contó angustiado el propietario a La Voz.

“Entraron a robar, se llevaron todo y, cuando se estaban por ir, prendieron el horno, pusieron pizzas y empanadas a cocinar, prepararon sangría, hicieron una fogata en el depósito, no sé si para quemar el negocio o quemar evidencias… Y después de que terminaron de comer y tomar me dejaron esta carta”, comentó el comerciante.

El muchacho considera que “la zona está liberada” para los delincuentes que actúan de noche.

Fuente : La Voz