Lo confirmó la fiscal Jorgelina Gómez. El compañero de Rodrigo Bustos, el policía que mató a Franco Amaya en  el control policial que se apostó en Los Gigantes y Alem en la madrugada de este miércoles, fue imputado del delito de omisión de los deberes de funcionario público aunque no quedó detenido. Se trata del superior que estaba a cargo del control. Fuentes de la Fiscalía confirmaron que se tomó la decisión porque era el superior y no arbitró las medidas para evitar lo que pasó y por no haber auxiliado de manera inmediata al joven luego del accionar del otro funcionario policial. El autor del disparo está acusado de homicidio calificado.

El hecho conmovió a la ciudad en la mañana de este miércoles. Familiares y amigos del jóvenes deslizaron la posibilidad de que se realice una marcha para pedir justicia. El joven será velado en Casa Brandalise desde este jueves a la medianoche.