El concejal Fernando Revello volvió a encender el debate público al cuestionar, a través de una carta abierta, las prioridades del gasto público en la ciudad, en especial la situación crítica que atraviesa la Escuela Especial Mariette Lidys, única en su tipo en la región.
El edil apuntó directamente contra el Ejecutivo municipal, al denunciar la falta de apoyo a las personas con discapacidad y contrastarlo con el millonario presupuesto destinado a la Defensoría del Pueblo.
Según Revello, mientras la única escuela para personas con discapacidad debe organizar ferias, rifas y pedir donaciones para subsistir, el Estado local destina más de 100 millones de pesos para organizar la elección del Defensor del Pueblo y 500 millones anuales para su funcionamiento.
“Estamos hablando de más de 100 millones para una elección que muchos vecinos ni siquiera saben que existe y 500 millones al año para sostener la Defensoría, mientras la única escuela especial tiene que mendigar para sobrevivir”, expresó el concejal.
Revello fue más allá y cuestionó el sentido mismo de sostener una institución como la Defensoría del Pueblo si el Estado municipal no garantiza los derechos básicos de los sectores más vulnerables.
“No se trata solo de una elección costosa. Se trata de una falta total de prioridades. ¿De qué sirve un Defensor del Pueblo si el propio Estado no protege a quienes más lo necesitan?”, señaló en su carta.
La Escuela Especial Mariette Lydis brinda educación especializada, contención y asistencia integral a niños, niñas y jóvenes con discapacidad. Sin embargo, tanto docentes como familias denuncian desde hace años el abandono estatal: falta de presupuesto, transporte inadecuado y condiciones edilicias precarias son parte de una realidad que no mejora.
Revello instó a las autoridades a reconsiderar el destino de los fondos públicos y propuso redirigir recursos hacia la educación especial, exigiendo mayor compromiso del Estado municipal en la defensa efectiva de los derechos de las personas con discapacidad.
