Un comunicado expresando la fuerte disidencia presentada ante el Tribunal de Cuentas de Villa Carlos Paz por el Frente Cívico se conoció este martes y se basa en el difundido superávit del municipio en la Cuenta General del Ejercicio 2024.
Una disidencia presentada por el tribuno de cuentas por la minoría Gustavo Molina ante el órgano de contralor de Villa Carlos Paz cuestiona duramente la Cuenta General del Ejercicio 2024, y advierte que el superávit anunciado por el Ejecutivo municipal “no se sustenta en una gestión eficiente”, sino que es el resultado de maniobras contables que encubren deuda, sub-ejecución presupuestaria y precarización laboral.
“El saldo positivo informado se sostiene mediante libramientos impagos, principalmente correspondientes a sueldos y retenciones del personal”, indica el dictamen disidente. Estos pagos se habrían desplazado al ejercicio 2025, generando —según Molina— “una ilusión de equilibrio fiscal que no se condice con la ejecución real del año 2024”.
La maniobra, calificada por el tribuno como “contabilidad creativa”, encubriría el diferimiento de gastos corrientes, dejando de asumir compromisos al 31 de diciembre para que no computen como erogaciones del año en curso. “No puede considerarse ahorro lo que no se paga, y mucho menos lo que se difiere para otro ejercicio”, sostiene el informe.
Obras públicas: ejecución mínima
La disidencia técnica también expone una alarmante falta de ejecución en fondos con afectación específica, destinados a obras y servicios para los vecinos. En promedio, el uso de estos recursos fue de apenas el 23,74%. En ese marco, se detallan partidas clave con niveles de ejecución extremadamente bajos: Fondo para Infraestructura Deportiva (1,70%), Fondo para Gas (3,18%) y Faldeo Montañoso (0,08%).
“Resulta contradictorio recaudar fondos con destino específico y luego no aplicarlos a los fines que justificaron su creación”, señala el documento. Para el tribuno, esta práctica vulnera el principio de legalidad presupuestaria y afecta el cumplimiento de los compromisos con la comunidad.
Otro de los puntos centrales del informe hace foco en la política fiscal del Ejecutivo. Durante el 2024 se aplicaron aumentos bimestrales en las tasas municipales, totalizando un 146,2%, es decir, por encima del 117,8% de inflación oficial. El documento señala que dichos incrementos “no respetaron el procedimiento legal de doble lectura y audiencia pública” establecido por el artículo 134 inciso 9 de la Carta Orgánica Municipal.
La disidencia también cuestiona el uso de las llamadas “Becas de Capacitación”, que —según el informe— superaron el límite legal del 30% del presupuesto autorizado por la Ordenanza 4088. “Este mecanismo, en los hechos, encubre relaciones laborales regulares bajo una figura que no otorga derechos ni garantías básicas a los trabajadores municipales”, advierte Molina.
Endeudamiento en alza y escasa liquidez
Por último, el documento del Tribunal señala un fuerte crecimiento del endeudamiento municipal: la deuda con proveedores y organismos aumentó un 131,4% respecto al año anterior, alcanzando los 2.989 millones de pesos. En paralelo, el coeficiente de liquidez se ubicó en apenas 0,99. Esto significa que el municipio “no cuenta con recursos líquidos suficientes para cubrir sus compromisos corrientes, sin recurrir a fondos afectados o remanentes de ejercicios anteriores”.
Molina remarca que esta es la tercera vez consecutiva que se verifica este indicador negativo: “El municipio se sostiene con fondos que no deberían destinarse al gasto corriente, lo cual refleja una fragilidad estructural de las finanzas públicas”.
Cabe recordar que el jueves pasado, el Concejo de Representantes aprobó en primera lectura la Cuenta General del Ejercicio 2024, con los únicos votos afirmativos del bloque oficialista Carlos Paz Unido. Los concejales opositores, entre ellos Daniel Ribetti, Fernando Revello, Noe García Roñoni, Pía Felpeto y Carlos Quaranta, rechazaron el proyecto con fuertes críticas a la gestión económica y a la falta de inversión en infraestructura.
Desde el oficialismo se defendió la existencia de un saldo positivo y se aseguró una “fuerte reducción del gasto público”, que incluiría recortes en la planta política y de gabinete. Sin embargo, las bancas opositoras lo desmintieron y apuntaron al escaso nivel de ejecución presupuestaria, al incremento de tasas sin mejoras visibles y a la acumulación de fondos específicos sin destino cumplido.
Aún así, el proyecto de balance fue aprobado en primera lectura, lo que habilita la instancia de audiencia pública, paso previo obligatorio para su aprobación definitiva. La audiencia se realizará este martes 3 de junio a las 15 horas, en el Salón Auditórium Municipal (Liniers 50).