Las fuerzas de seguridad españolas interceptaron en las costas del noroeste de ese país un semisumergible cargado, que según una primera estimación, tenía unos 3.000 kilos de cocaína de gran pureza procedente de Latinoamérica.

Dos de los tres tripulantes, de nacionalidad ecuatoriana, fueron detenidos y el otro, español, consiguió huir, informaron este domingo fuentes de la Guardia Civil española, que no precisaron el país de origen.

Los tres habrían cruzado el Atlántico abordo de la embarcación, llegaron a Cabo Verde y subieron hasta Portugal, según medios españoles. Ya a la altura de Lisboa se situaron a 40 millas de la costa para navegar en paralelo hasta España.

Según informó el Faro de Vigo, la tripulación habría decidido en la madrugada del domingo hundir la nave en la ría de Aldán-O Hío, a la altura de Punta Couso, al sentirse descubierta y perseguida por un operativo policial conjunto de Guardia Civil, Policía Nacional y Servicio de Vigilancia Aduanera.

Según El Periódico, se cree que el lugar desde el que salió el sumergible fue Guyana Surinam, cerca de la desembocadura del río Orinoco, en Venezuela. Sin embargo, la cocaína procedería de Colombia.

La nave, de 20 metros de eslora, fue finalmente localizada en la playa de Hio, donde quedó sumergida, en el municipio de Cangas de Morrazo (provincia de Pontevedra).

Llegó a la costa anoche, con mala mar, y transcurrirán varias horas hasta que pueda ser reflotada y se complete el pesaje para obtener la cantidad exacta de cocaína. Se estima que su contenido tenga un valor de más de 100 millones de euros.

Es un sistema de transporte de droga muy novedoso en Europa, aunque es habitual en América.