A pocas horas de que se cumpla la primera semana de la disposición que permite la presencialidad plena en los colegios que cumplan los requisitos, distintas escuelas de Carlos Paz, nos contaron cómo vivieron la medida.
De las instituciones educativas consultadas, todos señalaron que no pueden concretar la presencialidad plena en todos los cursos, grados o salitas.
Cabe destacar que los criterios que se incorporaron son sostener una distancia física de 90 centímetros entre estudiantes en las aulas; mantener 2 metros de distancia entre los estudiantes y el o la docente y un aforo permitido de hasta 25 estudiantes por sala, grado o curso.
Experiencias
En el caso de la escuela de nivel primario, Bernardino Rivadavia, ubicada en el barrio Carlos Paz Sierras, son “3 grados de los 12 que hay” en la institución, los que cumplían las condiciones para poder llevar adelante esta nueva resolución, contó la directora, Cristina Kassar.
Próximamente, dijo que se van a sumar dos grados más a esta modalidad. “Son salones más grandes y la cantidad de alumnos lo permite. Tendremos que sacar algunos muebles, y eso nos posibilita tener más espacio”.
Aclaró que están con “presencialidad” en los grados donde “da el número de chicos y el espacio físico, y en los otros seguimos con burbujas”.
Y agregó que para aquellos que están viviendo la presencialidad plena, “fue una emoción volver a encontrarse todos y también para la familia, a quienes en principio les sorprendió la decisión porque pensaban que iban a continuar con burbujas”.
Lo mismo ocurre en el IPEM 316, ubicado en el ingreso a barrio Colinas, donde no todos los cursos cumplen con el requisito que posibilita la presencialidad plena. “Tenemos nueve divisiones con dos burbujas cada una y tres con presencialidad plena”, detalló el director, Miguel Lorenzo.
Pero resaltó que igualmente, la nueva medida, “lo que mejoró, es que esas nueve burbujas, antes eran tres por división y asistían cada dos semanas, y ahora tres días una burbuja y tres días la otra”.
“Esto favorece al aprendizaje, sobre todo teniendo en cuenta la problemática que tenemos en la zona, donde no hay recursos tecnológicos y no contamos con Internet”, acotó.
La falta de espacio en algunos colegios es el gran condicionante, tal es el caso del IPEM 365 Dr. René Favaloro, instalado en el corazón de barrio Santa Rita.
“Tenemos los dos sextos que tenemos y los tres primeros años, son los que están en presencialidad plena, los demás siguen en burbujas, pero vamos a ir alternando entre dos y tres días. Nuestras aulas son chicas y bancos dobles, lo que reduce el espacio”, indicó el director, Pablo Angulo.
Por el lado del nivel inicial, desde el IES, indicaron que tanto en las salas del turno mañana como el de la tarde, no se puede dar la presencialidad plena, y siguen con burbujas como lo venían haciendo. No alcanzan las dimensiones del espacio físico para implementarlo.
