El Vaticano oficializó en las últimas horas la fecha en el que iniciará el cónclave para nombrar al nuevo líder de la Iglesia Católica.

Apenas unos días después del funeral de Francisco, que tuvo lugar el pasado sábado, la fecha establecida para el inicio del cónclave será el 7 de mayo.

La participación en el cónclave estará limitada a 134 cardenales menores de 80 años, de un total de 252 miembros del colegio cardenalicio, quienes poseen el derecho de voto en esta histórica elección.

Según indicó este lunes el vocero de la Santa Sede, Matteo Bruni, los cardenales celebrarán una misa solemne en la Basílica de San Pedro antes de iniciar las deliberaciones.

Desde la noche del domingo, la Capilla Sixtina permanece cerrada al público, en preparación para este evento clave que capta la atención de más de 1.400 millones de católicos alrededor del mundo. Durante el cónclave, los participantes deberán permanecer aislados y sin contacto con el exterior hasta que se designe al sucesor de Francisco.

Vale mencionar que hasta el día de la elección, el Vaticano atraviesa los “novendiales”, un período de nueve días de duelo marcado por celebraciones litúrgicas diarias y reuniones entre cardenales en las denominadas “congregaciones generales”.

Entre los prelados que representarán a Argentina en el cónclave figuran Víctor “Tucho” Fernández, Vicente Bokalic Iglic, Mario Poli y el arzobispo de Córdoba, Ángel Sixto Rossi.

El proceso de votación contempla hasta cuatro sufragios diarios: dos durante la mañana y dos en la tarde. Para ser elegido, el nuevo Papa deberá alcanzar una mayoría de dos tercios de los votos.

Si tras 30 votaciones no se logra un acuerdo, se decidirá finalmente por mayoría simple. El mundo sabrá que hay un nuevo Sumo Pontífice cuando del techo del Vaticano surja la tradicional fumata blanca; si no, el humo que saldrá será negro, indicando que no hubo consenso.