Irma”, el más poderoso ciclón del Atlántico categoría 5, dejó en el Caribe entre seis y ocho muertos, una cantidad no precisada de heridos, evacuados y damnificados, ciudades inundadas y viviendas destruidas, mientras sigue su ruta en dirección a Cuba y a la Florida, Estados Unidos. Un balance provisional realizado en la isla de San Martín, en las Antillas Menores, indicó que ascienden a seis las víctimas fatales por el fenómeno, según informó el prefecto de la vecina isla de Guadalupe, Eric Maire, mientras que el teniente coronel Vincent Boichard, uno de los responsables de la protección civil, dijo que los muertos son ocho en declaraciones que formuló hoy al canal “BFMTV”, ambos citados por EFE.

De acuerdo al Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Miami, “Irma” mantuvo su fuerza al atravesar las Antillas Menores en el Caribe, y hoy dejó atrás Puerto Rico y amenaza ahora a la República Dominicana con vientos de hasta 290 kilómetros por hora con lo que se mantiene en categoría 5, la máxima, y continúa rumbo a República Dominicana, Haití, Cuba y la península estadounidense de Florida.

“Esto es un desastre nacional”, declaró el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, citado por la cadena Univisión, al señalar que el meteoro destruyó el 90 por ciento de la infraestructura en Barbuda, una de las primeras islas afectadas el miércoles con vientos de 295 kilómetros por hora, según consignó DPA.

Browne estimó los daños de forma preliminar en unos 150 millones de dólares y no pudo informar sobre cifras de fallecidos o heridos en la isla, habitada por unas 1.600 personas, mientras que en la vecina isla de Antigua, donde viven unas 80.000 personas, destruyó viviendas y arrancó una gran cantidad de árboles.

En Puerto Rico, las autoridades reportaron más de 500.000 usuarios sin electricidad y cerca de 30.000 sin agua, a causa de los vientos que provocaron además la caída de árboles y del tendido eléctrico, aún antes de que “Irma” tocara tierra, y alrededor de 2.000 personas fueron refugiadas en albergues establecidos por el Gobierno.

Mientras tanto, en La Habana, el Gobierno cubano decretó el estado de alerta para las ocho provincias orientales de la isla, y las autoridades iniciaron la evacuación de más de 36.000 turistas extranjeros que actualmente están de vacaciones en polos de ocio situados en la costa norte oriental y central, donde recae la mayor amenaza del peligroso huracán, que se comenzará a sentir en la isla el viernes.

Por su parte, el gobernador de Florida, Estados Unidos, Rick Scott, declaró que “Irma” podría ser el más potente y destructivo que azotó alguna vez la zona. Scott decretó hace días el estado de emergencia en Florida y ya fueron evacuados los cayos del sur, a los que sólo se puede llegar por un sistema de puentes y que estarían especialmente expuestos. Además, un informe de Naciones Unidas advirtió que hasta 37 millones de personas podrían sufrir los efectos de “Irma”, un catastrófico meteoro que no está solo, ya que el CNH indicó que otros dos se formaron en el Atlántico: el errático “Katia”, que está frente a las costas mexicanas en el Golfo de México, y “José”, ubicado lejos de tierra en el Caribe. El organismo informó que tanto “Katia” como “José” evolucionaron rápidamente de tormenta tropical a huracanes con vientos sostenidos de 120 kilómetros por hora.

“Katia” tiene un comportamiento que sorprendió a los expertos porque avanza hacia el sureste, en lugar de dirigirse hacia el norte como la mayoría de los huracanes, y está ubicado a unos 295 kilómetros al este de Tampico y 300 kilómetros al nor-noreste de Veracruz y se desplaza lentamente a unos seis kilómetros por hora. México emitió advertencia de huracán para la costa del estado de Veracruz, entre Tuxpan y Laguna Verde.

Se anticipó que “Katia” se alejará un poco de tierra y luego volverá a acercarse, para ingresar a la costa mexicana en el estado de Veracruz a última hora del viernes.

“José” está 1.65 kilómetros al este de las Antillas Menores y su centro se desplaza rápido, a 26 kilómetros por hora, pero en este caso el CNH aclaró que “No hay advertencias para la costa”. Previamente a “Irma”, el huracán “Harvey”, que alcanzó categoría 4, golpeó el golfo de México antes de sembrar la devastación en Texas, en el sur de Estados Unidos