El ministro de Educación provincial Walter Grahovac, señaló que aún no hay certezas sobre el regreso a las aulas; pero aseguró que los primeros en hacerlo serán los estudiantes de los últimos años del nivel primario y del secundario.
“Los alumnos de sexto grado y año séptimo -en el caso de los estudiantes de escuelas técnicas– serán los primeros en volver al aula, porque con ellos tenemos una urgencia distinta a la del resto de los alumnos, ya que el año que viene cambian de nivel”, explicó.
No obstante, afirmó que aún no hay fecha de regreso a las aulas, al tiempo que reconoció que “julio es el mes más agresivo por el frío y la verdad es que si volviésemos a clase en agosto evitaríamos la exposición a un clima de riesgo”.
Evaluaciones y calificaciones
Respecto a la evaluación de los niveles educativos, desde la cartera de Educación indicaron que se continúa con una política particular como resultado de la cuarentena y las nuevas condiciones de enseñanza-aprendizaje, priorizando el proceso en lugar del resultado final.
“Hay algo que hacemos en las aulas que es más que calificar cuando se evalúa. Con el retorno de las clases presenciales, se diseñará un mecanismo que permita calificar y respaldar al que ha podido adelantar; y para aquel que no ha podido hacerlo por distintos factores se establecerá un plan estratégico para que pueda alcanzar “una calificación bajo el efecto escuela”, puntualizó el ministro.
Y expresó: “Pedimos que los estudiantes y sus familias se queden tranquilos porque haremos todos los esfuerzos para que logren los saberes fundamentales del nivel que terminan, y si para ello necesitamos excepcionalmente continuar con actividades durante febrero próximo, utilizaremos ese tiempo también luego del receso de verano”.
Finalmente argumentó: “Cuando nosotros decidimos no calificar ahora es porque entendemos que hay un efecto escuela que está alterado. Hay una desigualdad muy grande; y si a eso le sumamos la situación económica, la parálisis comercial y productiva, el hecho de que haya personas que han perdido el trabajo y no pueden llevar el ingreso a su hogar, existe una carga de angustia además de una falta de escuela. Entonces, terminaríamos calificando desigualdades, por eso podemos postergarlo”.





