Mientras en la ciudad de Córdoba los nombres Olivia y Mateo lideraron las preferencias de las familias para sus bebés; en Villa Carlos Paz el escenario presenta algunas similitudes, pero también marcadas diferencias. Así lo confirmó la jefa del Registro Civil local, Marta Zilli, en diálogo con Canal 2 de Carlos Paz televisión al detallar los datos oficiales correspondientes al año 2025.

En el caso de los varones, el nombre que se mantiene en el primer puesto desde hace al menos tres años es Bautista.

Según precisó la funcionaria, se trata de una elección constante en la ciudad, sin una referencia directa a figuras del deporte, la televisión, las redes sociales o el streaming, como ocurría en otros tiempos con las novelas.

Detrás de Bautista aparecen Mateo —en sintonía con la tendencia provincial—, Milo, Fausto y Giovanni, este último vinculado en parte a la presencia de familias de origen italiano en la ciudad.

En cuanto a las niñas, el ranking de nombres más registrados durante 2025 estuvo encabezado por Bianca, seguida por Francesca, Emma y Filipa. Este último caso remite a una influencia mediática puntual, ya que coincide con el nombre de la hija de Paula Chaves y Pedro Alfonso, aunque desde el Registro Civil aclaran que, en general, la elección de nombres no responde a fenómenos sociales ni familiares específicos, sino a decisiones personales tomadas al momento de la inscripción.

En términos demográficos, los datos muestran una fuerte caída en la cantidad de nacimientos registrados en la ciudad. Hasta la fecha, el Registro Civil de Villa Carlos Paz contabilizó 463 inscripciones durante 2025. No obstante, desde el área aclararon que la ley permite inscribir a los niños tanto en el lugar de nacimiento como en el domicilio de alguno de los padres, por lo que varios bebés carlospacenses nacidos en centros de salud de Córdoba capital podrían figurar registrados fuera de la ciudad.

La cifra contrasta de manera significativa con los años de mayor natalidad. En 2014, Villa Carlos Paz llegó a registrar más de 1.100 nacimientos, rozando los 1.200, lo que evidencia una baja pronunciada en la última década.

Así, los números oficiales no solo reflejan cuáles son los nombres que marcan tendencia en la ciudad, sino también un cambio profundo en la dinámica demográfica local, con menos nacimientos y elecciones de nombres cada vez más desligadas de modas culturales o mediáticas.