Un nuevo caso que, a priori, caratulan como de gatillo fácil, conmocionó el pasado domingo a la madrugada a la localidad de Paso Viejo, ubicada sobre ruta 38 a 165 kilómetros de Villa Carlos Paz.

Allí, Joaquín Paredes, de 15 años, fue alcanzado por un disparo policial durante un episodio que tiene varias versiones encontradas, a favor y en contra de los efectivos.

Carlos Paz Vivo! accedió al testimonio de dos de los amigos de Joaquín que estuvieron con él aquella noche y dieron su versión de lo sucedido.

“Eran como las 3 de la mañana, estábamos acá en la plaza y llegaron dos policías y se bajaron con la Itaka; igual que siempre cuando nos corren”, comenzó a contar uno de los jóvenes, de 17 años.

Dijo que “si se bajan y nos hablan bien, nos vamos a ir; pero bajaron con la Itaka y ahí nos fuimos para atrás del dispensario, donde lo mataron”.

Expresó que seguían allí porque estaban festejando el cumpleaños de uno de los chicos. Además, sostuvo que uno de los policías que es cuñado del agasajado les dijo que, si se quedaban sin generar disturbios, podían hacerlo.

“Pero pasaron unos minutos y llegaron dos patrulleros y una chata y se bajaron gritando con una 9mm. Nosotros les decíamos que no podían sacar las armas, que no teníamos nada y estuvimos hasta que uno disparó la Itaka y ahí nosotros corrimos. Pero uno sacó la 9mm y disparó. Una de las balas le pegó a Joaquín”, apuntó.

El joven desmintió que ellos hayan atentado contra los efectivos y generado semejante reacción de los uniformados.

“Tiraron sin avisar y nosotros no teníamos nada, ni armas blancas ni piedras. Estábamos asustados. Les gritábamos que había uno muerto. Fuimos y golpeamos en la Comisaría y no atendió nadie. De hecho, la misma versión de ellos decía que nosotros tumbamos la puerta para entrar y ver si había alguien”, indicó.

Por otro lado, apuntaron que “no hicieron nada para salvarle la vida” a Joaquín.

“Murió en el lugar porque le pegó en el corazón. No habían pasado ni 20 minutos cuando lo vi y ya estaba morado. Pero estaba tirado, se estaba muriendo y no hacían nada. Estaban esperando que llegara la enfermera y al que fue herido en las dos piernas lo tuvo que llevar un vecino porque no había nadie que conduzca la ambulancia”.

Y cerraron: “Éramos como hermanos. Nos conocemos desde jardín y nos criamos juntos desde muy chicos”.

Este martes a la tarde desde la Fiscalía a cargo de Fabiana Pochettino estuvieron tomando declaración a los jóvenes que estuvieron presentes aquella noche y avanzan con la investigación que, hasta el momento, tiene a cinco policías detenidos.