Por un lado, los miembros del equipo de salud del Hospital Sayago reclaman varios puntos y van a continuar con la medida de protesta. Y por el otro, buscan aunar fuerzas y velar por la salud de dos compañeros que tienen Covid y están en terapia.
Este 1 de diciembre arrancaron las asambleas permanentes en el Hospital municipal Gumersindo Sayago, que fueron votadas como medida por el personal de salud, ante la falta de respuesta del Ejecutivo por diversos reclamos.
Las asambleas se van a realizar todos los días de 10 a 12 y 16 a 18. “Hace 21 años que trabajo en el Hospital y esto me pone muy triste, será porque tenemos que dejarle algo mejor a los que vienen”, subrayó con lágrimas en los ojos, la médica pediatra, Cristina Farah.
Entre los puntos que reclaman están el “aumento salarial, reconocimiento de trabajo de riesgo, pago de los feriados, que más o menos se acordó”, dijo la profesional. Y agregó que es a través del gremio que están dialogando con las autoridades del municipio.
La médica contó que la semana pasada “hubo un acercamiento” y “se llegó a una solución, pero luego se retractaron y volvimos a una situación peor de la que estábamos porque antes se había aceptado la licencia sanitaria y ahora pasó a estudio”.
Para la profesional, el reclamo “es justo” y dijo que van a seguir con la medida, ya que “un 94 por ciento del personal quiere hacerlas”.
Abrazo simbólico
El 3 de diciembre se conmemora el Día del Médico y, en ese marco, proyectan un abrazo simbólico al hospital municipal a las 10. “Hablando entre todos llegamos a la conclusión que no tenemos tantas cosas para festejar este año”, comentó la pediatra.
Y agregó que ese día, van “a elevar intenciones y energía y los creyentes sus oraciones, para la recuperación de nuestros compañeros que están los dos en terapia intensiva, entubados y en estado crítico”.
Uno de ellos es el enfermero Pablo Miranda, que presta servicio en el área de cuidados intensivos del nosocomio local e ingresó a la Unidad de Terapia Intensiva el pasado 8 de noviembre con Covid-19. El otro es el médico Portillo Rossell, que se desempeña como Jefe de Hemoterapia del Hospital Sayago y también presta servicio en el Domingo Funes.
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