Foto: La Voz

El jurado popular convocado para decidir sobre el caso en el que Brenda Barattini le cortó los genitales a su pareja, decidió de manera unánime sentenciar a la arquitecta de 28 años a 13 años de prisión efectiva por tentativa de homicidio con alevosía.

En su declaración final ante el jurado, Brenda señaló que estaba arrepentida por lo que hizo, pero por el contexto pareció referirse más a su suerte, con el “me jodí la vida”.

Esa actitud de arrepentimiento por su situación y no con la víctima fue uno de los detonantes de la condena.

La fiscal Laura Battistelli mostró su satisfacción por el resultado logrado y reconoció su sorpresa por el veredicto unánime del jurado popular que coincidió con su pedido de que la mujer tubo intención de matar.

“Hasta en su última palabra, ese rol de víctima permanente lo siguió jugando. Dijo ‘Yo Brenda Barattini me arruiné la vida’. En ningún momento empatizó con la víctima. Inició este juicio pensando en ella y terminó este juicio pensando en ella”, analizó.

Pocos minutos después del veredicto, desde Santiago del Estero, la víctima de la tijera usada con intención de matar, hoy con 42 años, todavía arrastra secuelas físicas y psíquicas difíciles de evaluar en su evolución. La víctima recibió una compensación de 493.665 pesos en concepto de daño emergente, lucro cesante pasado, pérdida de chance y daño moral.

Los familiares de Brenda, protagonizaron incidentes dentro de la sala por lo que fueron desalojados. Una vez afuera, continuaron con los insultos y reproches hacia la fiscal y los jurados. La defensa de Brenda apelarán la medida.

Ni la instrucción ni este debate oral pudieron determinar qué llevó a Brenda a intentar cortarle el pene a su amante o, eventualmente, matarlo de esa forma. Sin embargo consideraron que no fue un acto aislado, sino que fue un plan premeditado, planeado y finalmente ejecutado.

Los hechos

El 25 de noviembre de 2017, Brenda Barattini atacó en los genitales a S. A. F. en la cama del departamento de ella, en bulevar Chacabuco, barrio Nueva Córdoba. La pareja estaba manteniendo una relación sexual. Según la Justicia, el hombre tenía los ojos tapados y, con una tijera de podar, la joven le realizó una mutilación en los genitales. Acto seguido, le gritó: “¡Morite, hijo de puta!”. El ataque, había sido premeditado y la arquitecta había anotado todo en un cuaderno.

Tras brindar distintas versiones (que incluyeron una supuesta violación que fue desestimada), al parecer el hombre tenía videos y fotos en su celular y que habían sido captados sin la voluntad de Brenda. La joven adujo que esas imágenes eran enviadas a sus amigos. “Me tenía como un trofeo”, dijo la joven.