El gobierno de facto de Bolivia reveló este miércoles que pidió a Interpol que active una orden internacional de captura contra el derrocado presidente Evo Morales, para seguir el proceso en su contra por presunta sedición y terrorismo.

El anuncio lo hizo el ministro de Gobierno, Arturo Murillo, quien detalló que se adoptó esa
decisión después de que se conociera una posible visita de Morales a Chile, para participar de un encuentro sobre derechos humanos, aunque ese viaje no fue conrmado por allegados al ex mandatario.

“Se ha activado la orden de Interpol internacional; he dado orden esta mañana que se active aquello. En realidad he chequeado que se ha activado; eso debe ser así porque tiene una orden de apremio”, dijo Murillo, que mostró un par de esposas.

Murillo, hombre clave del Gobierno de facto de Jeanine Áñez, dio por emitido el “sello rojo” de la Interpol contra Morales, pero la orden de captura no aparecía publicada en el sitio web de la Policía internacional.

Morales fue obligado a renunciar el 10 de noviembre y después de unas semanas de asilo en México se radicó en Argentina como refugiado.

El Ejecutivo de Áñez lo acusa de sedición y terrorismo por promover los cortes de ruta y otras protestas que siguieron al golpe de Estado de noviembre.