El cura párroco de Villa Carlos Paz abrió el acto del 25 de Mayo con un mensaje profundo y directo: habló de los jóvenes sin oportunidades, el drama de los jubilados, la pobreza, el juego online y la necesidad de una nueva forma de ciudadanía. Lo escucharon, entre otros, el gobernador Llaryora y el intendente Avilés.
El tradicional desfile patrio en Villa Carlos Paz comenzó este sábado con una invocación religiosa a cargo del padre Pablo Nasif, párroco de la ciudad, quien pronunció un mensaje cargado de contenido social, espiritual y ético. Frente al palco oficial, donde se encontraban el gobernador Martín Llaryora, el intendente Esteban Avilés, la vicegobernadora Myrian Prunotto y demás autoridades provinciales y municipales, Nasif pidió construir una Argentina donde la empatía y la inclusión sean pilares fundamentales.
“Necesitamos una revolución de la empatía y la ternura, de la alegría y la misericordia”, expresó, citando al Papa Francisco. Luego fue más allá, al señalar con crudeza la realidad que atraviesan muchos jóvenes del país, atrapados entre la falta de oportunidades y ofertas peligrosas: “No solo pensemos en bajar la edad de imputabilidad, pensemos en que los chicos no tengan como únicas opciones la droga, la violencia, el juego online… o el cementerio”.
También se refirió a la situación de los jubilados que deben elegir entre comer o comprar medicamentos, y a las personas con discapacidad que siguen esperando políticas reales de inclusión. “Una patria donde nadie sea descartable”, sintetizó.





