El fin de semana largo de octubre es considerado un termómetro para lo que puede suceder en el verano y si el método no falla, Carlos Paz y las sierras cordobesas vivirán una temporada estival con altos niveles de ocupación.
En la mañana de este viernes, la ocupación hotelera llegaba al 94 por ciento, un porcentaje altísimo si se tiene en cuenta que la ciudad posee unas 40 mil plazas de alojamientos.
En la noche del viernes, una buena cantidad de locales gastronómicos trabajaron con lista de espera y la situación se vivió tanto en el microcentro como en la avenida Libertad y en la Costanera.
La cola para esperar un taxi también es un indicador de la afluencia turística y la parada 1, en San Martín y 9 de Julio, tuvo momentos en que sobrepasó las 30 personas aguardando su turno.
La sensación que se palpaba en las calles de la villa entre los turistas es que la espera para salir a recorrer algún punto turístico del país se hizo larga para la mayoría y estos días de receso se ven como un alivio ante las largas restricciones por la pandemia de coronavirus.
Los espectáculos teatrales y musicales que se pusieron en escena en la ciudad también mantuvieron una gran afluencia de público. Las dos noches de La Beriso en el Luxor estuvieron a pleno y el resto de shows que se propusieron en las salas de la ciudad trabajaron con buen nivel de espectadores.
