El expresidente brasileño Jair Bolsonaro fue trasladado detenido de forma preventiva este sábado en Brasilia, tras varios meses cumpliendo prisión domiciliaria.
La detención se llevó a cabo por la Policía Federal en cumplimiento de una decisión del Supremo Tribunal Federal (STF).
La determinación surge por un decreto de prisión preventiva y no tiene que ver con la ejecución de la condena de 27 años de cárcel que se basa en la conspiración para impedir la asunción del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva tras perder los comicios en 2022.
El expresidente se encontraba bajo prisión domiciliaria desde agosto, monitoreado electrónicamente en su vivienda en un condominio de lujo en la capital. El STF había rechazado a mediados de noviembre un recurso contra su condena, que establecía que debía cumplirse en “régimen cerrado” (prisión)





