La causa por el fentanilo contaminado, que ya provocó la muerte de 96 personas en distintos puntos del país, sumó un nuevo capítulo cargado de tensión. En el programa “Sólo una vuelta más”, emitido por TN, Ariel García Furfaro, dueño de HLB Pharma Group S.A., se enfrentó en vivo con Soledad Francese, madre de Renato Nicolini, la víctima más joven de la tragedia.

Renato, de 18 años, había sufrido un accidente y se encontraba en recuperación en el Hospital Italiano de La Plata, cuando recibió una dosis de fentanilo del lote 31202. Según la investigación, el fármaco estaba contaminado con dos bacterias, una de ellas propia del laboratorio. La neumonía provocada por esa contaminación derivó en su muerte.

Durante el intercambio, García Furfaro intentó disculparse y deslindar responsabilidades, incluso planteando hipótesis de sabotaje contra su empresa. Sin embargo, Francese lo responsabilizó directamente:
“Fue la vida de mi hijo la que vos estropeaste con las bacterias que estaban en tu fentanilo… Sos responsable de todas las muertes”, le dijo, rechazando cualquier pedido de disculpas.

La mujer remarcó que el lote había sido fabricado con serias irregularidades, duplicando el tiempo de elaboración y sin respetar las temperaturas de proceso. También aseguró que las familias de las víctimas no están de acuerdo con la recusación del juez Ernesto Kreplak solicitada por el Gobierno, ya que valoran su investigación y no quieren que sea apartado de la causa.

Mientras tanto, el Gobierno nacional exigió la detención de García Furfaro, advirtiendo que, en caso de no avanzar con el procesamiento, recusará al juez. Por su parte, el empresario se declaró inocente, vinculó la contaminación a un posible “atentado” y apuntó contra dirigentes políticos y funcionarios, acusándolos de maniobras para perjudicarlo.

La investigación continúa, y la Justicia ya logró secuestrar más de 100 mil ampollas adulteradas en todo el país, evitando que sean aplicadas a pacientes. La fiscalía sigue reuniendo pruebas para determinar las responsabilidades penales en una de las crisis sanitarias más graves de los últimos años.