El padre Alejandro Nicola, actual párroco de la Parroquia del Niño Dios de Villa Carlos Paz, viajó hace poco más de 10 días a Buenos Aires para encontrarse con un hallazgo histórico de gran valor: tres cajas con documentos y fotografías pertenecientes a la fundación de la Estancia de la Quinta del Niño Dios, origen de la presencia jesuita en la ciudad.

Entre ese material inédito, se encuentra un valioso diario de quien dirigía estos predios en la villa y cuyo relato relaciona directamente los inicios de la Estancia con los primeros pasos de nuestro fundador Carlos Nicandro Paz.

“Tuve la alegría de recibir la invitación del Superior General de los jesuitas en Argentina y Uruguay, porque encontraron en el archivo histórico que tienen en la curia general tres cajas con papeles de la fundación”, relató Nicola. “Como yo soy el párroco ahora, querían que los viera y opinara sobre todo lo que había allí”.

Entre el material, se destaca un diario escrito por el padre Gros, uno de los tres primeros jesuitas que llegaron a la estancia. Allí, el sacerdote narra episodios y anécdotas de la época, como la visita de don Carlos Nicandro Paz, quien le comentó: “Gracias a ustedes voy a ver si hago un par de casitas para alquilar, porque sabiendo que habrá misa asegurada, la gente va a querer venir a este lugar”.

El diario también detalla que, gracias a la instalación de la estancia jesuita, el primer lugar de la zona con luz eléctrica fue allí. “Obviamente, con el genio y la visión desarrollista de don Carlos Paz, pero con un vínculo muy fuerte entre iglesia y comunidad”, subrayó Nicola.

La historia de la Estancia La Quinta

La historia se remonta al 17 de diciembre de 1906, cuando la estancia fue donada por Eugenia Gastañaga, perteneciente a la alta aristocracia cordobesa. Apenas 12 días después, el 29 de diciembre, llegaron los primeros jesuitas. “Fue todo un revuelo porque había gente viviendo allí y no sabían dónde alojarlos. Las anécdotas del diario son muy pintorescas”, señaló el párroco.

El documento también rescata la figura del hermano Font, responsable de la construcción de la iglesia y la ampliación del convento del noviciado, hoy parte del colegio parroquial.

“Hay fotos hermosas, incluso la piedra del altar de la iglesia, que el año que viene cumplirá 100 años de su colocación”, destacó Nicola.

Próximos a los 120 años de la llegada de los jesuitas

El material permanecerá bajo custodia de la congregación jesuita, aunque existe la intención de obtener copias para exponerlas en la ciudad. “Estamos viendo si podemos digitalizar ese material; la municipalidad y el Parque Estancia La Quinta ya lo han solicitado. Sería hermoso montar un espacio tipo museo para resguardar imágenes y objetos, y que la comunidad pueda conocerlos”, anticipó Nicola.

De cara a 2026, cuando se cumplan 120 años de la llegada de los jesuitas y 100 años de la piedra fundamental de la Iglesia del Niño Dios, la parroquia planea actividades conmemorativas.

“Incluso, el decano de Arquitectura de la Universidad Católica de Córdoba nos dijo que este lugar merece un libro. Creo que sería un proyecto ideal para salvaguardar el patrimonio y dejarlo a las futuras generaciones”, concluyó Nicola.