El invierno se adelantó en Córdoba y, según los especialistas, llegó para quedarse. Así lo aseguró el pronosticador meteorológico Juan Mario Navarro, del Observatorio de Salsipuedes, donde anticipó un panorama invernal breve pero marcado por intensos fríos y varias nevadas en zonas serranas.
“Esta semana vamos a tener mínimas entre 4 y 6 grados, con máximas de 14 o 15, pero ya entre el 13 y el 18 de junio se espera el ingreso de un aire polar muy fuerte, con mínimas de hasta 3 grados bajo cero y máximas que no van a superar los 9 a 12 grados”, explicó Navarro.
Esta nueva ola polar se anticipará al cambio de estación. Según indicó el pronosticador, justamente se espera que el invierno sea “corto pero contundente” con entre 7 y 9 eventos de nevadas en distintas regiones de las sierras. “Va a nevar en el Champaquí, en las Altas Cumbres, y también hay posibilidades de nevadas en el Valle de Punilla, en las Sierras Chicas y hasta en Calamuchita”, detalló.
Navarro recordó que el otoño fue anómalo, con temperaturas mínimas que fueron elevadas para la época. “En mayo tuvimos mínimas entre 12 y 19 grados, y máximas de hasta 28”, recordó. Pero señaló que estas temperaturas se encuentran dentro de lo normal si se lo compara con años anteriores. “En 2017, 2020 y 2023 hubo temperaturas de 33, 35 y hasta 38 grados en el norte del país en pleno otoño”, aclaró.
Lluvias que se adelantan
Uno de los datos positivos que dejó Navarro fue que las lluvias acortarán el período de sequía, lo cual será beneficioso para no tener incendios graves que se extiendan varios días.
Las lluvias acumuladas desde octubre del año pasado hasta abril de este 2025 acumulan “más de 880 milímetros, casi el doble de lo que llovió en el mismo período del ciclo anterior”, explicó. Y aunque aún faltan 200 milímetros para completar el año meteorológico, Navarro afirmó: “Vamos camino a cerrar un 2025 con entre 1.100 y 1.300 milímetros de agua, algo que no ocurría desde 2018”.
Este nivel de humedad trae aparejada otra buena noticia: la temporada de incendios podría ser más leve. “Todavía hay mucha vegetación verde y se esperan más lluvias en septiembre y octubre. Eso va a hacer que el fuego, si aparece, no sea de grandes dimensiones”, señaló. Aun así, Navarro advirtió que ya se quemaron más de 42 mil hectáreas este año, por lo que el riesgo no desaparece del todo.
Una transición marcada
El pronosticador explicó que estamos atravesando una fase de neutralidad climática, con señales hacia una posible La Niña leve a fines del invierno. “Esto genera ingresos de aire polar más secos pero muy potentes. El frío no va a ser permanente, pero sí aparecerá en forma de pulsos intensos”.
La primavera, según anticipó Navarro, llegará con lluvias y humedad. “Va a terminar el invierno con calor, humedad y lluvias desde septiembre, lo cual es raro pero positivo”, aseguró.
Con el primer evento de nieve ya confirmado para esta semana en el Champaquí y las Altas Cumbres, la provincia se prepara para un invierno que, aunque corto, promete dejar postales blancas y heladas.





