Con números de ocupación que varían según la categoría de cada establecimiento, la apertura de la actividad turística se vive con mucha intensidad en las calles de la ciudad.
El tránsito en las principales arterias de la ciudad son un reflejo de la afluencia de visitantes, al igual que la peatonal y las Costanera que este finde se llenaron de turistas.
Hubo confiterías y restaurantes que tuvieron colas de espera para acceder y también se notó que se estiraron los horarios permitidos por el protocolo que emitió la Provincia para la apertura turística.
Los números de ocupación rondan entre el 40 y el 60 por ciento según el establecimiento que se consulte y la expectativa es que durante el receso invernal se produzca un movimiento similar durante los fines de semana.
Fotos: Fernando Villa y Alberto Pereyra.





