En el extremo norte del país, Jujuy ofrece un encuentro único con la naturaleza, las tradiciones y la historia. Entre montañas multicolores, sabores andinos y costumbres ancestrales, en apenas cuatro jornadas es posible adentrarse en su espíritu más profundo, combinando gastronomía típica, creencias originarias y escenarios naturales que quitan el aliento.
A continuación, una propuesta para descubrir la provincia a través de un itinerario que mezcla lo mejor de sus pueblos y paisajes.
Día 1: Tilcara y San Salvador de Jujuy
El punto de partida puede ser Tilcara, un pueblo de aire bohemio que recibe con sus calles de piedra, su feria artesanal y peñas donde la música folklórica late hasta la madrugada. Aquí, una cena de pastel de quinoa o picante de llama en un hotel boutique prepara el espíritu para lo que vendrá.
Por la tarde, el camino conduce a la capital jujeña. San Salvador sorprende con su casco histórico, la Catedral, el Cabildo y la Casa de Gobierno, donde un recorrido guiado gratuito revive la gesta del éxodo jujeño, el legado de Belgrano y la historia de la bandera de la Libertad Civil.
Día 2: El Tren Solar
El segundo día puede iniciarse en Purmamarca, con su célebre Cerro de los Siete Colores y el Paseo de los Colorados. Allí, entre tortillas rellenas y artesanías, se respira la esencia de la Quebrada.
Desde allí, el itinerario puede continuar hacia Tumbaya, un pequeño rincón donde la conexión espiritual con la Pachamama forma parte del día a día, y luego a Maimará, que se abre paso al pie de la Paleta del Pintor, un telón de cerros pintados por la naturaleza.
El recorrido se potencia a bordo del Tren Solar de la Quebrada, un transporte sustentable que utiliza energía limpia. Entre relatos, coplas y leyendas, los guías acompañan el viaje con ventanas abiertas a un paisaje único.
Día 3: Salinas Grandes y Purmamarca
La jornada comienza atravesando la sinuosa Cuesta de Lipán hasta alcanzar las Salinas Grandes, un inmenso espejo blanco a más de 3.400 metros de altura. Allí, además de las clásicas fotos con perspectiva, se puede conocer el proceso artesanal de extracción de sal y sentir el silencio de un lugar fuera del tiempo.
En el regreso, Purmamarca invita a una última caminata por su plaza, la iglesia y su famosa cancha de fútbol, catalogada por la FIFA como una de las más pintorescas del mundo.
Día 4: Humahuaca y la Quebrada de las Señoritas
El cierre del viaje combina historia y paisajes. Humahuaca, con su Monumento a los Héroes de la Independencia y su vida cultural vibrante, da paso a la aventura en vehículos 4×4 hacia el mirador del Hornocal, el famoso Cerro de los 14 Colores, a más de 4.300 metros de altura.
De regreso, una parada en Uquía permite visitar su iglesia colonial con ángeles arcabuceros, joya del arte cuzqueño, y sumarse a una caminata guiada hacia la Quebrada de las Señoritas. Este rincón de rocas rojizas, esculpidas por siglos de viento, está cargado de leyendas y tradiciones de Carnaval.
Este itinerario de cuatro días reúne lo más genuino de Jujuy: escenarios extremos, identidad cultural y propuestas sostenibles como el Tren Solar. Desde la energía festiva de Tilcara hasta el silencio inmenso de las Salinas, cada rincón ofrece una historia y una razón para regresar.