Los incendios en el norte de Córdoba no dan tregua y los bomberos, brigadistas y los aviones hidrantes continúan trabajando en el lugar bajo condiciones meteorológicas que no ayudan a la situación.
El origen de los incendios aún está en investigación, no obstante se trabaja sobre la hipótesis basada en testimonios que sostienen que, el viernes pasado, cayeron tres rayos durante una tormenta eléctrica en esa zona.
Desde ese entonces, el fuego se intensificó y alcanzó sectores agrícolas en los departamentos de Sobremonte, Tulumba y Río Seco.
“En el norte, no hay otra que tener vacas, por lo tanto, si hay incendios, se quema el alimento y el agua se llena de cenizas”, expresó el productor agrícola Guillermo Sienrra, reflejando de alguna manera la realidad económica del lugar, que vive del ganado.
Sienrra tiene un campo en el paraje Chuña Huasi (Sobremonte), uno de los más afectados por el incendio. En el pueblo, habitan cerca de “100 personas y 1000 en sus alrededores. Todos los que viven en la zona están dedicados a la cría de bovinos”.
Describió al norte de Córdoba, y expresó que es “tan viejo como la Argentina, ya que por allí pasa el camino real y toda la vida se hizo explotación de cría. La casa que está en mi campo tiene más de 350 años”.
Para graficar lo que viene ocurriendo, dijo que el fuego “hizo desaparecer el norte de Córdoba”, ya que por dónde pasó “no dejó nada en pie, no hay alambre, ni pasto y la hacienda anda suelta, se perdió el rastrojo”.
El productor señaló que en su caso, en tres días desaparecieron “1300 hectáreas. Y va quemando para un lado y para el otro, de acuerdo a como sopla el viento. Hay gente que encierra a sus animales y el fuego se los mata”.
“Logré encerrar hacienda en un lugar que no tiene nada, por eso tuve que llevarles algo para comer. Me puse a sacar cuentas para ver la posibilidad de alambrar, y son cerca de 185 millones de pesos para darle la vuelta al campo para que no se salgan las vacas y alimentarlas a corral, cuestan 80 mil pesos mensuales”, comentó.
El productor aseguró que son cifras “impractibles si el gobierno de la Provincia no declara desastre. No tenemos recursos económicos, porque las crías no lo producen ni tampoco recursos materiales”.
Compleja realidad
Para Sienrra, la situación “es muy seria para ese Departamento, teniendo en cuenta que el 60 por ciento de la cría de Córdoba sale de allí”.
En el campo de este productor, hay una familia encargada no solo de cuidar el sitio, también de trabajar en la hacienda. “Es gente que toda su vida se dedicó a esto, de hecho nacieron ahí, están preparados para eso y es excelente como lo hacen, pero ahora se quedaron sin herramientas, el incendio se las sacó”.
Sin embargo, el fuego no llegó a la vivienda en la que habitan, pero señaló que están en alerta porque si este martes el viento cambia de dirección y sopla del oeste, corre riesgo de que se incendie.
Armar todo lo que tenía hace una semana atrás, lleva “muchos meses y plata, más de la que uno dispone de la rentabilidad de ese emprendimiento. No soy un gran productor, pero hay otros que tienen más de 5 mil que están en la misma situación, y ni hablar de la economía de subsistencia entre 300 y 500 hectáreas que viven de 50 vacas, es realmente serio”.
Detalló que para volver a la actividad, “tendría que disponer del triple de mano de obra, si la hacienda queda allí, debo contar con aproximadamente 30 millones de pesos. Por el momento, solo pienso en que el incendio no sea peor”.
