Horas de profundo dolor se viven por estas horas tras conocerse este jueves el fallecimiento de Felipe “Torito” Guzmán, el pequeño de apenas once meses que luchaba contra una leucemia mieloide aguda y que había movilizado a toda la comunidad con campañas solidarias para acompañar a su familia.
Desde hace tres meses, “Torito” permanecía internado en el Hospital de Niños de Córdoba, donde recibió distintos tratamientos y transfusiones.
Su historia había despertado una ola de solidaridad en la ciudad y en el Valle de Punilla: vecinos, instituciones y comercios organizaron colectas y donaciones de sangre y plaquetas para ayudarlo en su dura batalla.
A pesar de la fuerza de sus padres, Belén Farías y Clever Guzmán, y del acompañamiento de la comunidad, el pequeño no logró superar las complicaciones de la enfermedad. En las últimas semanas, su estado se agravó a raíz de un virus que afectó su recuperación.
El desenlace generó gran conmoción en la ciudad, donde la historia de “Torito” se había convertido en símbolo de lucha y esperanza. Amigos, vecinos y allegados se unieron en mensajes de apoyo y condolencias para la familia, que atravesó meses difíciles al trasladarse a Córdoba para permanecer junto a él.