El Concejo vivió una nueva sesión caliente

En la última sesión previa al receso de la actividad regular del concejo, el oficialismo aprobó el ejercicio contable 2016, luego de un empate en 6 votos, en que todo el arco opositor votó en contra a excepción del edil del PRO Marcelo Cuevas.

Los tres concejales del frente cívico encabezados por Walter Gispert, además de Omar Ruiz (GEN), Natalia Lenci (UCR) y Laura Orce (PJ) rechazaron el proyecto de aprobación por lo que el oficialismo necesitó del doble voto de la presidenta Alejandra Roldán para aprobar el ejercicio contable.

La concejal Soledad Zacarías, justificó la aprobación del presupuesto argumentando que “las cuentas son claras y mostramos un gobierno sólido”. 

Asimismo, Zacarías hizo hincapié en la reducción de la deuda: “Nosotros tenemos un balance en 2016 que viene a revertir una situación sistemática de 2011. En ese año recibimos una deuda que era mayor al 50% del presupuesto en ejecución. Con el tiempo eso se fue revirtiendo. Y además, hay una decisión del intendente de no endeudar a futuras gestiones”.

Sobre la actitud de la oposicón, Zacarías esgrimió argumentos políticos: “La oposición no sabe de donde agarrarse, no hace pie y desaprueba obras que son para la gente con la única intención de molestar a la actual gestión.No les quedan argumentos. Tenemos una previsión económica que hace que no dependamos de la situación económica externa. De hecho el Tribunal de Cuentas aprobó el ejercicio por unanimidad”.

Para finalizar, emuló a Cristina Fernández y su famosa frase: “Opinan desde el desconocimiento. Le diría a la oposición que primero ganen las elecciones, gobiernen y después les tomamos las sugerencias que quieran. Es fácil opinar cuando es oposición, otra cosa es la realidad y gobernar”.

Ruiz: “El superávit que presentan, son obras que no se hicieron”

Por su parte, el edil Omar Ruiz, señaló que su postura negativa a la aprobación se debió a un cambio de actitud del gobierno: “No podía acompañar el balance ya que a diferencia de años anteriores hay una actitud más conservadora del gobierno en cuanto a gastar. Se presenta como un logro la diferencia entre lo recaudado y lo gastado. Pero no es así, cuando uno presenta un superávit de 150 millones de pesos, uno piensa en las obras que no se hicieron“.

En ese sentido, Ruiz señaló que se perdió dinero: “Ese dinero puesto a plazo fijo, pierde 10 puntos. Es decir que varios millones de pesos se perdieron en la inflación. Y hay na pérdida de costo de oportunidad en las obras que no se hicieron”.

Ruiz aclaró que no hay objeciones legales, sino de oportunidad política: “Desde el punto de vista legal y técnico ha sido aprobado por el tribunal d cuentas y el auditor de gestión. Pero desde el punto de vista político, se debió haber consultado como ejecutar ese presupuesto que no se realizó. Reitero: Se perdió mucho dinero al elegir este camino”.