Por orden del fiscal Ricardo Mazzuchi se realizaron una serie de operativos en nuestra ciudad, tras lo cual se secuestraron más de un millar de historias clínicas de personas que presuntamente fueron atendidas por la médica “trucha”.
La semana pasada se conoció públicamente el caso de una falsa médica que trabajó durante tres años en el “hospitalito” de barrio Colinas, donde prestaba servicio como médica clínica pese a que ella misma decía ser gastroenteróloga.
El municipio desvinculó laboralmente a la mujer y presentó una denuncia penal en su contra. El fiscal Ricardo Mazzuchi comenzó a investigar y ordenó allanamientos en la vivienda de la sospechosa, en la casa de su madre, en dos centros de salud privados, en dos empresas que prestan el servicio de atención de emergencias y urgencias, y en “hospitalito” municipal.
El resultado de estos procedimientos que se llevaron a cabo en los últimos días arrojó el secuestro de algo menos de 1.500 historias clínicas en las que se presume habría participado la médica “trucha”.
Sin embargo, en ninguna locación pudieron hallar a la acusada, por lo que se presume no estaría en Carlos Paz y, según fuentes vinculadas a la causa, estaría prófuga de la Justicia.
En busca de más pruebas
La investigación del caso incursionará en las próximas horas en la localidad de Freyre, ubicada a 30 kilómetros de San Francisco, en el este de la provincia de Córdoba, donde la mujer que nunca se recibió de médica atendió en la guardia de un sanatorio privado.
Mientras tanto, la Justicia intentará localizar a la acusada para notificarla sobre la investigación que se llevaba a cabo y, probablemente, informarla sobre una imputación en su contra.
Médica “trucha” y polifuncional
La mujer, se sabe, ejerció la profesión durante tres años en el en el Centro de Salud del Distrito Oeste de Carlos Paz. También prestó servicio en la empresa que el municipio contrata para atender urgencias y emergencias en la vía pública.
Además, la acusada trabajó hasta hace pocas semanas para otra empresa de servicios de emergencia y coordinaba “las rondas” de chequeo médico en los hoteles donde se alojan grupos estudiantiles. Trabajando para esa misma empresa, la cual tiene contrato con Caminos de las Sierras (concesionaria de la Red de Accesos a Córdoba), habría atendido en más de una oportunidad a accidentados en la autopista Carlos Paz – Córdoba.
También perteneció al staff médico de dos centros de salud privados de nuestra ciudad, uno ubicado en calle Belgrano y el otro en la esquina de Tucumán y Buenos Aires.
Y como se mencionó arriba, hasta hace unos años prestó servicio en la guardia de un sanatorio privado de la localidad de Freyre.
