El festival se llenó de tradición

Este fin de semana el Polideportivo Sol y Río fue el lugar elegido para una nueva edición del Festival del Pastelitero. Organizado por el centro vecinal Villa del Río junto al centro vecinal Miguel Muñoz B, el evento que contó el apoyo del Gobierno de la Ciudad, reunió a cientos de vecinos en dos jornadas colmadas de tradiciones.

Comidas típicas como locro, choripán, asado con cuero, puestos de artesanías, un notable programa de artistas locales y de otras provincias, muestra estática de automóviles del CAMC (Clubes de Autos y Motos de Córdoba) y destrezas a cargo de distintas agrupaciones gauchas, fueron algunos de los ingredientes de este encuentro que coronó con el “Pastelito de Oro” a María Ramos,  elegida entre más de 25 pasteliteros de la ciudad.

Marcelo Iriarte, uno de los organizadores mostró su alegría por la convocatoria: “Comenzamos el sábado por la noche con un multitudinario encuentro donde hasta hubo gente que no pudo entrar por la gran cantidad de vecinos. Esta es una festividad única para la ciudad, que hemos retomado y que queremos continuarla todos los años. El domingo tuvimos una caravana de autos antiguos, la participación de agrupaciones gauchas, espectáculos de destrezas, nos acompañaron los veteranos de Malvinas, comidas típicas, asado con cuero tradicional;  esta fiesta es una conjunción del arte popular.

El Secretario de Calidad Institucional y Participación Ciudadana Darío Zeino destacó la participación del vecino y las familias en esta fiesta: “Estamos muy contentos con el trabajo realizado por los organizadores. Ver este tipo de encuentros donde se realzan tradiciones tan nuestras que no se ven a diario es muy gratificante. Ver a la familia disfrutando desde el más chico hasta el más grande, ver a los pasteliteros que continúan con la tradición familiar de la fabricación y venta son alguno de los motivos que nos llevan como Municipio a apoyar estas actividades que surgen de los mismos vecinos”.

Es una buena oportunidad para destacar lo nuestro, el pastelito es una gran tradición que nos distingue a nivel turístico y además son tantas las familias que por tantos años trabajaron y hoy siguen con la fabricación y venta.

Hubo competencia donde se eligió al “pastelito de oro”